hasta pronto,no hasta nunca.

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Cada día que pasa siento el corazón más pesado....hace ya dos semanas que mi hermana se fue, todavía no ha llegado ninguna correspondencia y el estar en esta mansión encerrado me recuerda a ella en cada momento.

no puedo pensar en otra cosa que en volver a verla...cada vez que me despierto corro a su habitación esperando que sea un sueño pero...siempre que abro la puerta es lo mismo, una cama tendida, armarios y estantes vacios y un ambiente frio.

Este sentimiento de soledad me invade completamente a pesar de que siempre estoy acompañando ya sea de las sirvientas, caballeros y demás . Esto está afectado mi concentración y ganas de comer y no debería pero no se que hacer.

No quería estar más tiempo encerrado en esta mansión y después de un intento de entrenamiento fallido pensé en salir a caminar por el pueblo cercano para dejar de pensar.

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Al llegar al comienzo de la calle central baje del carruaje y le pedí a mis caballeros y criadas que se mantuvieran alejados. A pesar de las quejas que aceptaron, mi mente comenzó a divagar, no estaba pensando en nada solo miraba las tiendas pasar y pasar hasta que un local llamó mi atención .

Era un edificio bastante grande de tres plantas que ya conocía, era la biblioteca central del pueblo nunca he sido de estudiar así que no pensé en entrar pero me recordó la fuente cercana.

Sin pensar mis pies caminaron hacia ese lugar y como aquella vez era bastante bonito y tranquilo, me senté en el borde de la fuente mirando hacia la nada, mis manos rozaban el agua jugando con ella todo era muy pacífico tanto que no note el tiempo que llevaba haciendolo hasta que una voz me sacó de mis pensamientos.

-¡Eres el niño de las rosas!

Mis ojos dejaron de mirar al cielo para mirar frente a mi para encontrarme cara a cara con alguien conocida.

-eh?

-¡Cuanto tiempo! ¿Cuanto ha pasado?¿Un mes?

Mi mente por fin volvió en si y la reconocí, mi mirada se alegró un poco y me apresure a responder .

-si, mucho tiempo...tienes razón hace ya un mes chica de la fuente.

-vaya,vaya,vaya, así que ese es mi apodo ahora.

-es que no me dijiste tú nombre.

-lo hiva a hacer pero tú saliste corriendo.

Su dedo índice que me señalaba golpeó mi frente con un toque tras su última frase, recogiendo la parte posterior de su vestido tomo asiento a mi lado en la fuente mientras su mirada permanecía en mi.

-sabes, volví varias veces durante las semanas ese mismo día esperando volver a verte pero tú nunca volviste.

-apesra de ser un niño también esto ocupado.

-mejor admite que te habías olvidado de mi.

-b-bueno digamos que... si pero fue porque estuve ocupado y pensado en muchas cosas.

-ah,ah, digamos que te creo.

-¿porque querías verme?

-uhmm¿Curiosidad? Creo.

-¿que querías saber?

-primero, quería darte las gracias por animarme ese día, segundo quería saber quién eras y tercero, ¿Para quien eran esas rosas?.

-¿Porque crees que eran para alguien en especial?

-¡Vamos porfavor! Las rosas son cara por loque devén ser para alguien especial además no es como si llevaras rosas para un desconocido.

Rencarne como_ ¡¡¡ ¿Sabes que? al diablo con los clichés! Haré lo que yo quieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora