Daño | Chestappen

33. Max

Después de estar sentado durante un largo rato mirando al pequeño escenario donde los músicos hacían su espectáculo, mire hacia la ventana y note a alguien bastante familiar afuera.

¿Michel?

Sonreí, sin creer que el realmente estuviera aquí. Quiero decir, sabia que el vendría – no me pregunten como, simplemente lo sabia – pero aun así se sentía raro. El realmente estaba aquí. Llegando tarde, pero el estaba aquí.

Todos seguían aplaudiendo al finalizar el numero musical cuando salí, feliz. Literalmente estaba enamorado de este chico. Ni siquiera podía creer lo que estaba sucediendo, pero la forma en que mi corazón empezó a latir mas rápido solo por verlo lo hizo bastante real. A medida que me acercaba a el, luche contra el impulso de besarlo como saludo; probablemente me daría un golpe si lo hiciera.

"Hey." Dije en cambio, deteniéndome junto a el. "Viniste." Sonreí y el me miro en silencio. El no parecía estar bien.

"Buen numero musical." Señalo con la cabeza hacia el escenario interior, sonriendo levemente, y no pude evitar reírme como un idiota. "No sabia que te gustaba este tipo de lugares y este tipo de música."

"Michel, trabajo en una tienda de CDs, escucho todo tipo de música, además estoy seguro que Angel te dijo que toco un poco el piano." Bromee, guiñándole un ojo y riendo una vez mas mientras el ponía los ojos en blanco.

"Exacto. Menciono el piano." Sonrió y me encanto como lo hizo. El realmente estaba hablando conmigo, sin estar borracho. Incluso me estaba sonriendo.

Michel miro hacia abajo, suspiro y me acerque a el.

"¿Qué ocurre?"

Volvió a apartar la mirada, mirando hacia el interior mientras abrazaba sus brazos y exhalaba lentamente, sin estar muy seguro de que decir a continuación. ¿Se había arrepentido ya de haber venido? Vamos, no puede ser tan malo estar cerca de mi.

"Lance apareció en casa de Alice." Susurro, poniéndome tenso ante la mención de su nombre. ¿Qué hizo que? Mas le valía no haberlo lastimado otra vez, porque si lo hizo, juro que conduciría hasta su casa ahora mismo y le rompería la cara yo mismo.

"¿Estas bien? ¿Te lastimo?" Le pregunte, apoyando mi mano bajo su barbilla para que finalmente pudiera mirarme, pero el me ignoro y retrocedió hasta que hubo suficiente distancia entre nosotros.

"Si estoy bien. Alice no dejo que me lastimara. Simplemente me hizo enojar." Dijo como si nada. Si Alice no hubiera estado allí, sabia que el ya estaría herido. ¿Por qué sigue con el después de todo? ¿Por qué el todavía lo protege después de todos esos años manejando su comportamiento agresivo? ¿Qué hay en su pasado que lo hizo cambiar todo en su vida por el, incluso su nombre? Porque ciertamente tuvo algo que ver con el. Antonio dijo que su vida era una mentira. ¿Por qué? Entonces, ¿Por qué sigue viviendo esa mentira si no es feliz?

"Sabes que serias mas feliz sin el, ¿verdad?" Digo sin darle importancia, apoyándome en la ventana tal como el esta, esperando que no retroceda otra vez. "Desde el primer día que te conocí pude verte estar en muchos problemas por su culpa. Solo dime una cosa: ¿eres realmente feliz a su lado?"

El abrió los ojos y me miro como si le hubiera preguntado algo absurdo.

"¡Claro que lo soy! ¿Qué mierda crees que estas preguntando?" Su voz se elevo un poco y respiro pesadamente por la nariz. "Somos una pareja, Verstappen. Las parejas tienen problemas. Así son las cosas." Si, se muy bien que las parejas tienen problemas, pero eso no significa que uno tenga que lastimar físicamente al otro.

"No son tu tipo de problemas." Susurre, mirándolo profundamente a los ojos. "Las parejas tienen que afrontar muchas cosas, pero el abuso no es una de ellas. El no tiene derecho a hacer lo que te hace." Entonces tome su mano y jugué con sus dedos mientras el suspiraba de nuevo, sin molestarse en intentar alejarse; no lo dejaría de todos modos.