Capitulo 18+
Ni yo ni Max nos dimos cuenta del momento en que Alice regreso a casa; no puedo estar seguro de el, aunque se que cuando desperté todavía estaba con los ojos cerrados y sus brazos alrededor de mi cintura abrazándome sobre la alfombra de la sala. La televisión ya no estaba encendida, y supe que Alice había sido quien la había apagado.
Fue justo cuando bostece ruidosamente, abriendo los brazos, que Max se atrevió a moverse, parpadeando un par de veces antes de sentarse con las piernas cruzadas y ofrecerme una mano para que yo pudiera hacer lo mismo. Una vez que estuve medio levantado, movió una de sus manos para peinar sus cejas, frotándose después los ojos y dejando que su cuello crujiera. Era la cosa mas hermosa que jamás había visto despertar, además de Angel, por supuesto.
Incluso me atreví a expresar mis pensamientos mientras lo miraba, observando como sonreía con cariño, demasiado cansado para tratar de ser descarado ahora.
"Muchas gracias."
Asintiendo, logre levantarme, rápidamente busque mis zapatos y presione el botón de mi teléfono que descansaba sobre la mesa de café para ver la hora, suspirando cuando me di cuenta de que eran cerca de las tres de la mañana y Alice no nos había despertado. Probablemente ya estaba dormida, con esa estúpida sonrisa de madre orgullosa.
"¿Es tarde?" Preguntó Max, hundiéndose en sus zapatos también y tanteando sus bolsillos en un intento de encontrar lo que supuse eran sus llaves, así que le hice un gesto para que mirara debajo de los cojines del sofá. El lo hizo. "Gracias." Añadió una vez que las llaves estuvieron pegadas a sus dedos.
"Demasiado temprano, mas bien." Respondí entonces, poniéndome los guantes y guardando el teléfono en mi bolsillo trasero. Max arqueó una ceja, mas confundido que desafiante; suspire de nuevo, el mero pensamiento me hacia enojar. "Casi las tres de la mañana. No creo que vaya a dormir mas esta noche; me siento bastante despierto, ¿sabes?"
El asintió, riéndose entre dientes, ahogándose brevemente con el aire antes de decir: "¿Supongo que nos vamos a casa, entonces?" Y justo después estaba doblando la cobija en el suelo, esperando algún tipo de respuesta mientras la colocaba suavemente en el sofá, recogiendo sus cosas y preparándose, parándose quieto junto a mi. "¿La oferta sigue vigente? Ya sabes, ¿pasar la noche allí?"
Sonreí tímidamente, asintiendo con una sonrisa: "Si te parece bien, claro." Puso los ojo en blanco, porque... Por supuesto que estaría de acuerdo con eso. Honestamente ambos sabíamos que no nos molestábamos en pasar el tiempo el uno con el otro; disfrutando los momentos tanto como podíamos. "Solo necesito ir a casa, por ropa decente, porque no volveré a usar la tuya, y bueno, dejaré mi carro allí."
Murmuro un rápido. "Seguro." Antes de caminar hacia la puerta y abrirla para mi, manteniéndola así hasta que salí. En silencio, la cerré, arrojando la llave nuevamente adentro a través del espacio entre el piso y la puerta, asegurándome de que estuviera segura, luego finalmente me di la vuelta para caminar hacia mi carro, observando distraídamente como Max hacia exactamente lo mismo.
Me siguió hasta mi casa, salió del auto justo cuando logre abrir la puerta principal, entramos y disfrute instantáneamente del calor que me envolvía. No era el ambiente mas cálido, pero aun así hacia mas calor que afuera, así que no podía quejarme mucho. Y de todos modos, dentro de un rato estaría arropado en brazos cálidos bajo una manta.
Max me observo mientras caminaba por la casa, agarrando las cosas mas necesarias y terminando algunos asuntos pendientes que había dejado antes de llevar a Lance al aeropuerto, y parecía no poder mantener sus manos alejadas de mis cosas, jugando con algunos souvenirs, señalando alguna estúpida mancha en la pared e incluso mencionando algunos títulos estúpidos que había leído entre los pocos libros del armario. De todos modos, no es que me importara. Todavía era una critica de Max Verstappen, así que era algo inútil, especialmente ahora que caminaba conmigo luciendo como un zombie.

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Daño | Chestappen
FanfictionNo te enamores de mi... estoy demasiado dañado para ti. ¿Qué estaría dispuesto a hacer por amor?