Daño | Chestappen

9. Max

- Max -

No podía creer que haya dicho que si a este favor, sin embargo, mi semana ya había empezado mal, y realmente no quería hacer esa tarea estúpida de la universidad. Y no importaba que George fuera muy molesto a veces, era también inteligente y un gran estudiante. Muy inteligente. Además, entretener niños durante tres horas a cambio de que me haga la tarea no sería tan malo, ¿verdad?

Como deduje, la respuesta fue 'no'. Busqué las llaves de la puerta y, una vez que estuve adentro, la cerré detrás de mí y colgué mi chaqueta en la percha de pie en la esquina de la habitación, saliendo de mis zapatos mientras caminaba a la cocina en calcetines blancos. No debería estar haciendo eso.

El único pensamiento que me molestaba ahora era el cómo me las arreglaría para ir a la fiesta y también a la doble cita con Charles. Probablemente iría un poco más tarde, pero solo unos minutos. Y tendría que llevar ropa conmigo, a no ser que quisiera llegar vestido de payaso. La idea de ponerme el traje parecía vergonzosa, pero, aun así, no podía dejar de pensar que, de hecho, me iba a sentir como un payaso allí. Charles estaría disfrutando a su chica, y yo solo trataría de no hacer sentir incomoda a su amiga. Y si ella intentará coquetear conmigo, realmente, no sabía que haría. Me preocuparé de eso cuando me tenga que preocupar; pero ahora necesitaba comer algo e ir a la cama, la clase había sido agotadora. 

Realmente no estaba de humor como para cocinar, o pedir algo, porque tenía mucha hambre, así que la sopa fue una buena idea, aunque no fue lo mejor que he probado. Coloqué el recipiente caliente entre mis manos y entré a la sala, acurrucándome en el sofá mientras encendía la televisión. Una vez que terminé de comer, entré a la cocina y coloqué todos los platos sucios en el fregadero, antes de irme a mi cuarto y, finalmente, acostarme en la cama.

Dios, necesitaba un descanso. 

..................

"Estaré ahí, Charles." El seguía quejándose, diciéndome que no lo podía dejar solo, o de lo guapo que debería estar para no avergonzarlo. "¿Puedes confiar en mí? Te dije que estaré allí. No te preocupes."

"Cuento contigo, Max. Por favor." Con eso dicho, colgó y finalmente pude entrar a darme una ducha antes de ir a jugar al niñero. O lo que sea.

Toda la semana había sido un infierno. A pesar de que la tienda permaneció la mayor parte del tiempo vacía, Esteban no podía dejarme solo y George me mandaba mensajes todos los días para asegurarse de que no había cambiado de opinión. Charles y Carlos pasaban las noches conmigo después de la universidad, pero no podían parar de gritar y jugar hasta que literalmente me enojaba y les apagaba el televisor gritándoles. ¿No podían ver lo cansado que estaba?

Los primeros exámenes del año estaban por venir, y todavía tenía mucho que estudiar, aunque aún, no tenía muchas ganas de hacerlo, ¿Quién las tenía? Además, el motor de mi auto se sobre calentó y dejo de funcionar, y tuve que ir a trabajar en autobús durante tres días, Eso fue definitivamente una mierda; toda esa gente presionándose entre sí, peleándose por un asiento vacío.

Pero, finalmente era domingo, y todavía no podía tomar un descanso. Tenía la fiesta y la doble cita. Tenía que empezar a vestirme.  

Después de media hora, estaba listo. Lo que llevó más tiempo fue vestirme con esa cosa, que parecía una tarea imposible. Mucha ropa y no sabía dónde debían ir mis brazos y piernas. Pero finalmente, lo hice, ya estaba listo para irme.

O Casi.

Aún tenía que hacerme el maquillaje de payaso, y tuve que pedir ayuda. Aunque no me complacía, tuve que llamar a una chica y el único número de teléfono que tenía realmente era el de Kelly. Si mi madre se entera de esto, no se callaría nunca, y efectivamente estaba harto de hablar de esa chica con ella.