No fue hasta que estuvo completamente oscuro y con un frio glacial afuera que comencé a juntar mis cosas alrededor de su departamento, saltando distraídamente sobre los cojines esparcidos en la alfombra y algunos incluso en el pasillo de las habitaciones, debido a la insistencia de Max de mantenerme con el en el sofá cuando tenia muchas ganas de ir al baño, arrojándome unos cuantos – y sin llegar a golpearme – como si eso fuera a resolver totalmente el problema.
El mero pensamiento de lo que había sucedido hace solo un par de horas me hizo sonreír estúpidamente, ya formando una pequeña bola de ropa doblada entre mis brazos mientras la recogía del suelo, donde la había arrojado después de que finalmente me había cambiado con mi propia ropa otra vez.
Obviamente, Max estaba dormido en el sofá – no es que la idea de que el este en el sofá sea obvia, sino en realidad el hecho de que está inconsciente – porque obviamente no me dejaría ni siquiera ponerme de pie si fuera completamente consiente de lo que estaba haciendo. Esa fue principalmente la razón por la que me levante con cuidado, sosteniendo lentamente su brazo y retirándolo de donde estaba colocado sobre mi vientre, caminando silenciosamente de puntillas hacia su habitación, y... bueno. Haciendo exactamente lo que estaba haciendo ahora.
La segunda razón por la que había sido tan cuidadoso (y, lógicamente, no se lo admitiría ni en mil millones de años) era porque se veía completamente adorable – y no, no hay otra manera de describirlo – con su boca medio abierta, la tapicera del sofá imprimiendo su marca en su rostro somnoliento, tan bellamente pacifico. Despertarlo seria una pena, ya que su yo dormido era definitivamente mi favorito.
Se veía lindo, tranquilo y crédulo, y tal vez incluso inocente, como seguramente no lo hacia cuando estaba despierto, todo descarado, coqueto y demasiado confiado. No es que sucediera todo el tiempo, de todos modos, porque Verstappen seguramente era la única persona que sabia como y cuando actuar de cierta manera conmigo; y tampoco me quejo, porque incluso si sus coqueteos apestan, se que sus objetivos no son hacerme sonrojar, en absoluto. Parece importarle mas verme simplemente ponerle los ojos en blanco, sabiendo que eso me hace sonreír tontamente.
Y después de todo, era una pena tener que despertarlo, porque no podía, simplemente no podía irme esta vez sin decirle adiós. No podía irme y dejarle pensar que todo lo que hizo anoche fue inútil, cuando, honestamente, había sido lo mejor que alguien había hecho por mi. Hoy incluso fue mejor. Y todavía no podía superar el hecho de que estaba sonriendo como un maldito niño porque el era tan estúpido que me hizo sentir mejor naturalmente.
Había sido solo un día, casi 24 horas solo a su lado, ¿tal vez? Y aun así, sentí que había nacido de nuevo.
Inclinándome frente al sofá, agarre el borde del mismo para apoyarme con una mano. Después de eso, vacilantemente toque el brazo de Max, solo ligeramente, sacudiéndolo casi imperceptiblemente para intentar despertarlo.
Murmuro una especie de queja y se giro dándome la espalda, abrazando un cojín y hundiendo su rostro en el.
"¿Max, Max?" Lo intente de nuevo, sacudiéndolo un poco mas fuerte ahora, inclinándome para darle un suave beso en el cuello, sin poder contener la sonrisa cuando literalmente se estremeció y medio sonrió, aun sin estar completamente consciente. "Hey, Max, levántate."
"Mhm, duerme... yo... duermo." Medio murmuro y medio dio (o al menos intento dar) una orden, enterrando su rostro cada vez mas profundamente en el cojín como si eso pudiera silenciar mi voz.
"De acuerdo, entonces me voy." Dije simplemente, levantándome y riéndome mientras el parecía regresar a la Tierra en un segundo, frotándose la cara con las manos y tratando de concentrarse en mi. "Sin besos de despedida." Agregue, solo para que se despertara por completo y agarrara mi muñeca, acercándome hasta que ya no estuviera acostado, sino sentado conmigo todavía de pie entre sus piernas.

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Daño | Chestappen
FanfictionNo te enamores de mi... estoy demasiado dañado para ti. ¿Qué estaría dispuesto a hacer por amor?