llegada de boros

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Kurama jugaba contra Genos, quien, sorprendido, comentó: —¡Señor Kurama, es muy bueno jugando!

Kurama, con naturalidad, respondió: —Claro, es sencillo mejorar.

Pero en su mente, se quejaba: "¡Mierda, estoy usando Haki de Armadura para mejorar mis reflejos y Haki de Observación para predecir sus movimientos y aun así me quita la mitad de la vida!".

Continuaron jugando, pero después de cinco rondas consecutivas, Kurama finalmente perdió. Mirando la pantalla, quedó atónito y susurró: —¿Perdí? ¿Usé todo a mi disposición para ganar y aún así perdí?

Suspiró, miró a Genos y admitió: —Realmente eres bueno en los juegos.

—Sí, señor Kurama —respondió Genos, serio.

—Sí, señor Kurama —respondió Genos, serio

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Cada cierto tiempo, Kurama volvía a perder, y, frustrado, dejó de jugar, pasando el control a Medu. "Este Genos es realmente bueno", pensó.

Al día siguiente, Genos, cocinando con un delantal rosa, les sirvió a Kurama, Saitama y una porción más pequeña a Medu, quien inmediatamente se quejó. Genos, con tono serio, le respondió: —Dama Medu, eres una medusa. No estoy seguro de cómo comes ni cuánta comida darte.

Medu, resignada, suspiró y comenzó a comer. Kurama, Genos y Saitama la miraron con curiosidad. Medu enrolló la comida con sus tentáculos, la envolvió en rayos, y la comida desapareció. Medu gritó emocionada: —¡Delicioso!

Kurama no entendió cómo Medu sabía el sabor de la comida, pero no preguntó.

Más tarde, Genos recibió una llamada de la Asociación de Héroes y dijo: —Algo grande ha sucedido. Necesito su ayuda, Saitama-sensei, Señor Kurama, Dama Medu.

Los tres suspiraron y respondieron casi al unísono: —¡Okey! —"Okey.""...okey."

En la sede de la Asociación de Héroes, Kurama entró con arrogancia. Su aura de poder hacía que la gente se apartara. Medu, descansando en la cabeza de Saitama, irradiaba una pereza parecida a la de él. Genos, como siempre, estaba completamente serio.

En cierto momento, un samurái apareció y saludó a Genos. Al ver a Saitama, intentó ignorarlo, pero antes de que pudiera, Kurama liberó su aura. El samurái cayó al suelo, y cuando vio al pequeño zorro mirándolo con ojos de "saluda o muere", se apresuró a saludar a Saitama, aunque claramente incómodo.

Dos segundos después, una voz femenina interrumpió: —¿Qué hace este calvo aquí? ¡Solo es de rango B!

Saitama, conocido como "El Calvo Dorado", frunció el ceño y dijo: —¿Quién es esa mocosa perdida?

Saitama, conocido como "El Calvo Dorado", frunció el ceño y dijo: —¿Quién es esa mocosa perdida?

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Kurama estalló en carcajadas. La peliverde, al escucharlo, miró a Kurama y, reconociendo su aura, retrocedió dos pasos. Luego vio en la cabeza de Saitama una medusa roja, y comenzó a gritar mentalmente: "¿Por qué este calvo tiene a la Medusa Sangrienta y a ese zorro? ¡¿Acaso son sus mascotas?! Si lo son, ¿qué tan fuerte es él?".

Tragó saliva y le dijo a Saitama, ahora con algo de respeto: —Vamos, calvo, a la sala de charlas.

Genos observó las microexpresiones de Tatsumaki al ver a Kurama y Medu, y luego su cambio de actitud hacia Saitama

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Genos observó las microexpresiones de Tatsumaki al ver a Kurama y Medu, y luego su cambio de actitud hacia Saitama. Suspiró pensando: "Tener mascotas tan fuertes realmente cambia tu estatus".

Ya en la Asociación, no ocurrió mucho hasta que el líder, Smich, dijo: —La amenaza de nivel Dios podría ocurrir en cualquier momento dentro de hoy o los próximos tres años.

Mostró fotos de Medu y dijo: —Posiblemente, esta es la amenaza de nivel Dios.

Pero antes de que pudiera continuar, todos escucharon la voz de una chica, claramente resignada: —¡Yo no quiero destruir el mundo, banda de idiotas!

Medu, desde la cabeza de Saitama, agregó: —¿De qué me serviría destruir el mundo? ¡Me quedaría sin comida deliciosa y sin videojuegos!

Kurama, viendo cómo Medu había echado por tierra su plan de mantener un perfil bajo, se resignó y dijo: —Mi compañera tiene razón. No nos sirve destruir el mundo. Seguramente la amenaza vendrá del subsuelo o del espacio.

En ese momento, un fuerte choque resonó fuera del edificio. Kurama, sin pensarlo, lanzó un Rasenshuriken al techo, destruyéndolo, y de un salto llegó a la azotea. Los héroes lo siguieron, y lo que vieron los dejó aterrados: Ciudad A, la ciudad con más habitantes, había sido destruida.


santiag22004/autor (en esta escena el creador de opm no sabia que hacer con tatzumaki aparte de hacernos ver que era psíquica por lo cual no tubo mucha influencia en esta trama de boros pero are que tenga presencia para aprovechar el echo  de su fuerza comparado con cualquier ser que no sea kurama medu y saitama obviamente)  

¡KURAMA SOY INVENCIBLE EN VARIOS MUNDOS¡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora