unos reyes demonios golpeados y una medusa evolucionada

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(para los primeros en ver el capitulo anterior, se siguiere que vuelvan a el, dado que se le agrego una imagen y me gustaría que la vieran)

 Kurama, antes de liberarse del sello, no perdió la oportunidad de jactarse de su poder. Desplegó su aura intensamente, extendiéndola por toda la región, e incluso más allá, hacia el continente.

En su forma de zorro, miró al cielo y, con una voz potente y altanera, exclamó:

—¡Qué bueno es estar de vuelta!

Observó el cielo con desdén, como si nada en la tierra fuera digno de su atención... hasta que una voz alarmada interrumpió su momento.

—¡Señor Kurama! ¡Me está pisando! —protestó una voz femenina.

Kurama se sobresaltó y, transformándose en su forma humana con su traje elegante, miró hacia abajo.

—¿Medu? ¡Oh, perdona! ¿Estás bien? ¿No te he ensuciado, verdad?

Medu se incorporó, sacudiendo su vestido negro y rojo, y lanzó una mirada fría al cielo.

—¿En qué importa ensuciarse? —murmuró para sí misma, con serenidad—. La tierra es parte de este mundo, y nosotros también.

Entonces liberó su propia aura, aún más poderosa que la de Kurama. Se colocaron uno al lado del otro, irradiando la presencia de seres inmortales que habían visto todo en el mundo... aunque ambos sabían que, en realidad, era exactamente así.

Miraron alrededor y notaron que el ambiente estaba bastante animado: allí estaba el rubio Veldora, Ramiris junto a él, Edgar con Milim, ¿acaso esos dos se estaban besando en secreto? Ignoraron ese pensamiento cuando sus miradas se posaron en una figura de cabello celeste, un lobo oscuro con un cuerno, varios hombres lagarto y, al centro de toda esa atención, un pelirrojo con una sonrisa arrogante, junto con algunos reyes demonios como grandes magos que ayudaron a sellarlos, hace algunos siglos atrás.

Medu y Kurama se miraron, desconcertados. ¿Por qué nadie estaba prestando atención a su dramática entrada? Ambos se sentaron, frustrados y ligeramente enfurruñados, dispuestos a ser solo espectadores.

Luego de lo que para Medu y Kurama fue un siglo Guy Crimson tomó la palabra:

—¡He obtenido el alma de Veldanava! —anunció con voz triunfante—. Y todo gracias a esos dos —añadió, señalando a Kurama y Medu.

Ambos se miraron confundidos, claramente sorprendidos. ¿Cuándo habían ayudado a que algo así ocurriera? Kurama retrocedió un paso con disgusto, mirándolo como si Guy tuviera algún grave problema mental, medu imito su acción.

Guy, molesto por sus miradas, agregó:

—¡Me refiero a sus acciones! Al modificar las leyes globales, incrementaron la inteligencia y el conocimiento mágico de todos. ¡Eso fue crucial!

Medu y Kurama se miraron, aceptando la explicación con una resignada comprensión.

Antes de partir o quedarse, Kurama tuvo un instante de lucidez y exclamó:

—¡Espera, ¿el alma de Veldanava?! —Sus ojos se abrieron en shock. Esa entidad era increíblemente poderosa, y si su poder estaba multiplicado por quince... Kurama sabía que no quería enfrentarse ni siquiera a una fracción de ese poder. Sin más, tomó a Medu de la mano, listo para irse.

Sin embargo, el chico de cabello celeste les bloqueó el paso y, en tono solemne, le dijo:

—Señor Kurama, por favor, quédese y ayúdenos en el ritual. Queremos quemar el alma de Veldanava. Detectamos un inmenso poder en el cielo, algo inexplicable. Pero si ocurre cierto evento, ese poder caerá directamente a la Tierra.

¡KURAMA SOY INVENCIBLE EN VARIOS MUNDOS¡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora