Valium // YM

🥀 Especial pt. 2 🥀

La fiesta de Halloween había terminado hacía rato. Taehyung y Jungkook regresaban a casa tomados de la mano caminando por las calles silenciosas, apenas iluminadas por algunos faroles y la neblina tapando algunas partes del camino. El aire estaba frío, y el eco de la música seguía en sus cabezas, un recordatorio lejano de la diversión que acababan de dejar atrás. Iban riendo mientras recordaban algunas cosas que habían pasado. Jungkook se dio cuenta que su novio no podía dejar de hablar por nervios y evitaba mirar hacia en frente a la calle obscura.

—¿Tienes miedo? —preguntó Jungkook con un tono de burla.

—¡Miedo tú! Quién sabe qué puedes hacerme...

Bromeó Taehyung, Jungkook se puso frente a él con una sonrisa traviesa y jaló de su cintura para abrazarlo y robar un pequeño beso.

—¿Algo como eso?

Murmuró cerca de sus labios antes de besarlo nuevamente, pero hubo una vibra que los hizo separarse y mirar hacia atrás, Taehyung con miedo se escondió abrazando a Jungkook. Pero el menor no vio nada, con suavidad abrazó a su novio antes de sepáralo para seguir su camino, sin embargo; apenas habían dado unos pasos cuando escucharon unos pasos detrás de ellos. Se giraron, pero la calle estaba desierta.

Se miraron, incómodos, y siguieron caminando.

—No tengas miedo, vienes conmigo. Estamos ebrios, no fue nada.

De pronto, sintieron una presencia detrás. Volvieron a parar y mirar, pero seguía sin haber indicios de alguien o algo. Cuando voltearon, había mimo a unos pocos metros de distancia frente a ellos, observándolos en silencio, con esa expresión inquietante en su rostro pintado de blanco.

Taehyung lo reconoció enseguida, se lo había cruzado varias veces en la fiesta, y aunque había intentado ignorarlo, algo en él le daba una vibra extraña. Permanecía quieto, con un vaso en la mano, mirando en dirección a Taehyung como si no existiera nada más. En un momento incluso se había acercado e hizo un acto de mímica para él, cortando una flor imaginaria y ofreciéndosela con una reverencia, pero Taehyung y sus amigos se habían burlado antes de seguir bailando.

Taehyung y Jungkook se detuvieron, y el mimo dio un paso hacia ellos, pero manteniendo el mismo silencio. Taehyung se aferraba a la mano de su novio empapándola de su sudor. Jungkook frunció el ceño y dio un paso adelante, alzando la voz.

—¿Qué te pasa? Vete a la mierda. La fiesta ya terminó.

El mimo no respondió. Jungkook suspiró, irritado, y tomó la mano de Taehyung para seguir caminando, pasándolo de largo y dejándolo atrás. A pocos metros, Taehyung notó que el mimo los seguía, manteniéndose a una distancia prudente, pero sin ocultarse. Jungkook, harto, le pidió a Taehyung que esperara y se dirigió hacia él.

El mimo lo recibió con un acto silencioso: hizo la mímica de sacar un cuchillo y lo alzó, como si amenazara a Jungkook con el arma invisible. Jungkook lo miró con desprecio, murmurando insultos, y avanzó hasta él, pero cuando estuvo a su lado, el mimo hizo un movimiento rápido y estrelló su puño con suavidad contra el abdomen de Jungkook.

Taehyung soltó una risa incómoda, seguro de que Jungkook le devolvería el golpe con creces, pero su sonrisa se desvaneció al ver a Jungkook tambalearse hacia atrás, mirando a Taehyung con ojos desorbitados. En su abdomen, la sangre comenzaba a brotar rápidamente, como si hubiese sido apuñalado, aunque no había ningún cuchillo visible.

—¡Jungkook! —gritó Taehyung, sin entender.

La sangre continuó manando, y de repente otro chorro brotó del costado de Jungkook, como si alguien lo apuñalara desde atrás con aquella arma invisible. No fue solo una vez, sino varias, en diferentes partes del torso. Jungkook soltó un quejido y cayó al suelo, mientras Taehyung retrocedía, paralizado por el horror.