30

10.7K 1.6K 527
                                    

Todo se congeló cuando escuché a Youngji llamando a Yoongi.

Me quedé estático sobre el frío mosaico que recubre el piso del baño. La espuma en mi cuerpo se secaba y solamente había rastros de ella, estaba empapado y con algunos recipientes de las cremas de Youngji sobre mi ser.

¿Qué mierda tenía Youngji en la cabeza?

Es bastante estúpido todo lo que hace. Al principio, y quizá un poco ahora, pensaba que eran cosas que ella hacía inconscientemente.

Ella sabía mi historia con Yoongi, o al menos una versión.

Si yo fuera novio de Yoongi, no dejaría que una perra que le mintió se le volviera a acercar.

Me quedé sordo a lo que pasaba en aquel momento, la puerta quería ser abierta y no podían gracias a que el pestillo estaba puesto.

— ¡Yoongi, haz algo, pudo pegarse en la cabeza!

La voz de Youngji gritando y con un tono desesperado me trajo de vuelta a la realidad.

Y supuse que ella llevaba gritando un buen rato porque entonces escuché a Yoongi.

— ¡Deja de actuar como una estúpida y ve a buscar la llave del baño, debes de tener!

Fue fuerte. Yoongi le había gritado a Youngji. No se escuchó más de la chica y la puerta dejó de ser forzada.

La incomodidad era palpable, ahora más que nunca quería quedarme encerrado en el baño.

Poco después la puerta fue abierta, me sentía un estúpido desnudo tirado en el baño, como pude tapé mis partes íntimas con las manos.

Sentí una toalla caer sobre mi cuerpo y cuando abrí los ojos, vi a Yoongi mirándome desde arriba con molestia. Youngji buscaba alguna herida en mi cabeza.

¿Mi vida iba a estar llena de estos momentos?

Momentos que yo solito me causaba. Jay tenía razón.

Fue entonces que, con un movimiento gentil hice a un lado a Youngji y me puse de pie, sin soltar la toalla que cubría mis partes íntimas.

Hice oídos sordos a lo que sea que fuesen a decir y caminé hasta mi cuarto.

Me moría de vergüenza, me sentía tan patético, tan...

¿Qué hago aquí, en esta casa?

Tres toques en la puerta detuvieron mi regaño mental.

— Ahora — mi voz salió muy baja para que me escuchasen, carraspeo un poco y vuelvo a decir—: Ahora me encuentro indispuesto.

Un poco de silencio, y de nuevo.

Comencé a vestirme y ver si se olvidaban de seguir tocando, pero no fue así.

De nuevo tres toques.

— A-ahora no.

— Voy a seguir tocando hasta que abras.

Jin. Jin hyung.

Con desespero abrí la puerta y me tiré a sus brazos. Jin correspondió y me llevó un poco hacia atrás para poder cerrar la puerta.

— ¿Qué pasó?

— Me caí en el baño...

Jin soltó una carcajada y se alejó un poco.

— Jimin, solamente te caíste, ¿qué es todo este drama?

Me quedé callado.

— Tienes un don increíble para hacer de las cosas pequeñitas algo muy grande. Anda, los chicos ya se fueron. Ve a enjuagar todo ese jabón seco y sales radiante para comer un poco de grasa.

Y así lo hice.

Me volví a bañar, me puse una pijama calientita y salí a la sala tomando lugar en una esquina del sofá. La chica de Hoseok comía una combinación rara entre pizza, helado y papas fritas. Youngji comía nuggets con ketchup y Jin solamente papas fritas con crema.

Y yo claro que iba a probar todo eso hasta reventar.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀ꕤ͝⏝ꕤ͝⏝ꕤ͝⏝ꕤ͝⏝ꕤ͝⏝ 

Este capítulo es, posiblemente, el más feo de todos. Perdón.

Tuve un bloqueo y si no salía de aquí, aquí nos íbamos a quedar.

Valium // YMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora