Segunda temporada de PARACETAMOL.
¿Qué tan rápido se olvida una mentira?
¿Qué tan rápido un golpe deja de doler?
¿Qué tan rápido se puede dejar de amar?
₊˚✧
(!) Es importante que lean la primer temporada.
Yoongi ve el auto de Youngji desaparecer por la calle, hoy era día de chicas y claramente él no estaba invitado. Todavía debía volver a la facultad, había trabajos pendientes por revisar.
Afortunadamente no le llevó demasiado tiempo ocuparse de ello, simplemente dejó sus carpetas sobre el escritorio y el maestro los revisaría en casa. Tenía lo que resta del día libre.
Camina por ahí, recorriendo la universidad, pronto iba a comenzar su ultimo año. Se encontró a algunos amigos, saludó a algunas antiguas conquistas y terminó sentado en la cafetería tomando una soda y comiendo un pedazo de pizza.
Todo se sentía raro, estar solo últimamente no era tan malo, disfrutaba de su soledad, tenía muchas cosas en la cabeza y estaba comenzando a fastidiarse.
Incluso empezó a ver un poco absurdos algunos de sus miedos.
Vio a Namjoon con Hoseok bromeando en la fila de la tienda, Hoseok había cambiado su color de cabello de pelirrojo a negro y se veía bastante bien. Ambos se veían bastante bien y felices. Y ellos ni siquiera notaban que su antiguo amigo deseaba estar con ellos en ese momento. Y Yoongi no sabía como hacer el primer encuentro.
Lo pensó bastante mientras ambos caminaban hacia las mesas, y le costó, pero al final levantó la mano llamando la atención de ambos chicos y señaló los lugares vacíos frente a él.
Fue bastante cómodo, nadie pidió explicaciones, sólo sabían que necesitaban revivir los buenos tiempos.
– ¿Cómo vas con Jin? – se atrevió a preguntar, disimulando un poco la pregunta dándole una mordida a la rebanada de pizza.
– Todo es maravilloso, vamos a vivir juntos pronto.
Yoongi se sintió orgulloso de su amigo, ese brillo en los ojos de Namjoon era incomparable con cualquier otra persona "enamorada".
– ¿Y tú? – Yoongi estira una mano para robar una papa del plato de Hoseok.
Era con el que más estaba avergonzado, y lo extrañaba, claro que sí.
– Ya sabes, un poco de esto, un poco de aquello –alza los hombros quitando importancia, gesto que Yoongi conocía muy bien. Lo hacía cada que iba a dar una noticia de las grandes –. Voy a ser padre
– No me jodas, Hoseok.
En la mesa se instaló un silencio, no incómodo. Yoongi estaba esperando a que le dijeran que era una broma; sin embargo, eso nunca llegó.
– No me estás bromeando, ¿verdad?
Hoseok niega.
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– Propongo un brindis –Yoongi habla fuerte, tratando de que ambos amigos, y Jin, le escuchen. La música en el lugar es bastante alta. Todos toman sus vasos y los alzan acompañando a Yoongi –. Por el hijo de Hoseok, por mis futuros hijos y por los hijos de Namjoon y Jin – todos ríen y chocan sus vasos llenos de alcohol.
Habían quedado de festejar la noticia. Hoseok le contó que había tenido una buena noche con una chica hermosa, una noche lo suficientemente buena para olvidar la protección.
Existían las pastillas del día siguiente. Para gente descuidada con la protección y más barata que un parto, o en otros casos, un aborto. Yoongi no entendía eso.
No quería meterse en eso de si está a favor o no del aborto. Era algo tonto. Si no te cuidaste, puedes tomar a otro día, o incluso hasta tres días después (¿por qué esperar tanto?) una pastilla de emergencia. A la gente le gusta complicarse la vida, ser irresponsable y hacer lío por todo.
Una pastilla de dos jodidos dolares.
Aunque la protección no estaba de más, una enfermedad sexual no era algo que pudieras abortar.
Hoseok le dijo que el aborto no fue opción, que era completamente responsable de sus acciones. Y que ambos estaban felices, asustados, pero felices.
Prometió presentarles a la hermosa próxima madre.
Terminando sus deberes en la universidad, fueron a casa, pero prometieron verse en dos horas en el club al que solían ir juntos siempre. Eligieron un lugar con asiento cómodo en media luna con la mesa en medio, comenzaron con bebidas bajas en alcohol, charlaron de lo que vendría próximamente en la vida de Hoseok, en la vida de Namjoon, y como iba la relación de Yoongi con Youngji. Luego llegó Jin, Yoongi le sonrió.
Las bebidas fueron subiendo, Yoongi en algún punto de la noche abrazó a Jin por los hombros y le dijo que se veían muy felices y que le daba mucho gusto verlos.
Más tarde, aproximadamente a las tres de la mañana cuando Yoongi estaba echando su estómago en el baño, le dijo a Namjoon:
