•Que no te digan que un beso solo puede darse piel con piel
o sino pregúntate cómo suena tu nombre susurrado en sus labios.•Que encajéis como encajarían dos piezas de distintos puzzles: libres.
•Que tus tres tristes tigres beban cerveza en su trigal
-y recuperen la sonrisa-.•Que no sepas cuál de las cuatro estaciones es tu favorita
-y que no te importe perder el tren si eso significa quedarse un poquito más-.•Sentir la magia manar de la yema de tus -cinco- dedos siempre que abraces a alguien.
•Que le grites al mundo entero que tú eres el sexto continente y que la Atlantida existe.
•Que cuanto más arriesgues,
más durarán tus siete vidas.•Que trabajes ocho horas al día y no haya un solo minuto en el que te quejes
-ojalá nunca llegue a pensar que la etapa de estudiante fue la más feliz de mi vida (que mi vida sea feliz, en definitiva)-.•Que lo único para lo que tengas que esperar nueve meses sea para empezar tu propia familia.
•Domir diez horas
-y querer las otras catorce-.•Descubrir once canciones nuevas y sentir cómo cada centímetro de tu piel se emociona -hasta que duele-.
•Que en la duodécima campanada todavía lleves el zapato puesto
-pero el pelo despeinado-.•Que las olas te saluden los pies -sí-
y que trece horas, trece días a la semana durante trece meses al año
seas feliz.Y yo te tengo a ti;
eso sí que es suerte.