''Qué fue antes: la poesía o su boca.''
Sergio Carrión.No me mires como si tu única premisa es dejarme atrapada entre la espalda y el corazón,
como si quisieses, a favor de ti mismo, encerrarme en una jaula y mirar cómo mueren mis alas entre los barrotes.
No me mires desde la lejanía como si la única pizca de tu anatomía capaz de besarme fuesen tus ojos;
sé valiente, que la enfermedad basorexia*
-esa única que estoy orgullosa de disfrutar-
no sólo la padecen los labios,
sino las manos,
los lunares
y todos los poros de tu piel que se erizan en contacto con la mía.Mírame,
que no importa cuántas veces llames al mismo número de teléfono si siempre es la misma voz la que contesta.
Mírame,
que mis ojos siempre están gritando
y sé que tú eres esa especie en extinción que todavía se fija en los pequeños detalles
-como mis pecas en una constelación
como canela perfecta para acompañar a tu café-.
Mírame,
y después de mirarme acércate
tancercaquepuedascontarmelasestrellas.
Y entonces,
solo entonces,
dejaré que te vayas
porque sé que no querrás hacerlo.*BASOREXIA: deseo irrefrenable de besar.