He encontrado por fin el valor para pasar página. ¿De dónde? Aún me lo pregunto. Quizás es porque cuando quieres algo con demasiada fuerza, hasta lo imposible se consigue. O quizás es porque es lo correcto y la vida quiere ponerme las cosas fáciles. Irónico, ¿verdad? Esa misma vida que hace que camine por la calle asustada de los fantasmas del pasado que amenazan con salir a mi paso cada vez que giro una esquina ahora mismo me ayuda p
a pasar página, a cambiar de libro. Pero cuanto más lo pienso, menos quiero que te vayas; y cuanto menos quiero que te vayas, más te odio por hacerme vivir en esta incertidumbre.
Y hay una parte de mí que desea que me eches de menos una vez que me haya ido, que vuelvas a por mí, que me tientes; sé que no debería. Pero mi parte lógica me dice que eso sería una locura; en el momento en el que vuelvas a por mí no tardaré ni un minuto en aferrarme a ti de nuevo. Incluso si ya te he olvidado por completo. Aunque bueno, eso es imposible; dicen que todo amor que ha sido verdadero perdura para siempre en tu corazón.