capítulo cincuenta y siete: vacaciones de verano.

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— viktor, ¡date prisa, yurio nos espera en el aeropuerto! sabes lo mucho que se enojará si llegamos tarde—yuri, quien cargaba en brazos a sarah apresuró a su esposo, mismo que con maletas en la mano y ropa de verano salió de la habitación. 

— lo sé, lo sé, vamos a tiempo al vuelo, no debería estar tan estresado —contestó con calma en sus palabras, sin preocupación alguna.

un mes y medio había pasado desde el tan anhelado nacimiento de su hijo, las vísperas de verano llegaron sin previo aviso, trayendo así la motivación por parte de yuri para planear un cambio de rutina, unas vacaciones en las ciudades más turísticas de california, una ciudad caliente por verano, pero ideal para playas. 

la pareja llegó al aeropuerto principal de la ciudad, encontrándose con yuuri, quien con una expresión de molestia al verlos alzó sus manos para llamar su atención. Ambos yuri se habían encargado de con entusiasmo reservar y comprar paquetes para el anhelado viaje que querían realizar, llegar tarde era algo que les causaba estrés.

querían que todo saliera perfecto.

— joder, ¿por qué siempre llegan tarde? muevan su trasero —gritó con notoria molestia, tomándolos de la mano para poder jalarlos en dirección a dejar sus maletas.

— ¡hace mucho calor, demasiado! —una vez ingresaron a la sala de espera a su respectivo vuelo, viktor hizo un puchero en forma de queja, los pocos minutos que estuvo fuera eran suficientes para darse cuenta del clima en la ciudad. 

— es cierto que rusia es un país frío, ¿pero son conscientes de que en california estaremos a cuarenta grados, cierto? —sugirió el azabache, quien acomodó sus lentes mirándolos de reojo. 

— ¿qué? —ambos rusos giraron sus cabezas hacia el azabache— yo jamás he estado a tal calor, el calentamiento global me preocupa demasiado. 

— estoy sorprendido de que sea tanto para ustedes, es verdad que los veranos aquí no son demasiados calientes, principalmente en esta parte del país pero, me sorprende —yuri empezó a reír—, california es un país muy caliente, me pregunto qué harán cuando conozcan latinoamérica.

— no saldré de la piscina entonces, compraré más protector solar, no tengo suficiente —pensó en voz alta antes de dedicarles una mirada rápida a la pareja—, ustedes dos, ¿por qué llevan tanto equipaje? ¿qué piensan hacer?

— digamos que...—viktor colocó su brazo alrededor de los hombros de su esposo con una sonrisa— tenemos nuestros planes románticos por separado, pero que los primeros días los pasaremos con ustedes, no se preocupen.

— no quiero saber qué cosas quieren hacer, pero hagan lo que quieran. 

— yo y yuri queremos conocer la ciudad y hacer turismo, nunca hemos estado en california antes después de todo, ¡sería aburrido si solo estamos en el hotel! 


— hagan lo que quieran, mientras pueda pasar tiempo con sarah en la piscina a solas todo estará bien, mejor si ustedes se van. 

— eso es cruel —mencionó viktor con una falsa sonrisa en su rostro—, ¿por qué quieres quedarte a solas con sarah? es mi princesa, no la harás tu princesa. 

— no sé si lo recuerdas, por que tienes más frente que cerebro, pero le compré trajes de baño con estampados geniales de tigre y leopardo, son conjuntos de verano perfectos, un estilo mucho más genial que las cosas que tú le compras —señaló con orgullo—, olvida los trajes y vestidos color azul con plateado y rosa en su armario, mi estilo queda muchísimo más hermoso.

¡Hicimos Historia! Yuri!!! On Ice.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora