— lamento haber dudado tu amor. — su voz se quebró por completo. Era la primera vez que yuri podía ver a viktor quebrarse de esa forma, en cierto modo, le sorprendió.
— viktor, no exageres. — le dió pequeñas palmadas en su espalda, con una sonrisa mostrándose en sus labios, — perdón por no expresar bien cómo me sentía. — el azabache levantó el mentón de su pareja, limpiando con la yema de sus dedos las lágrimas que sin control alguno brotaban de los ojos del peliplata. Dejó un beso en sus labios, en un intento de consolar a su querido prometido.
— preparé el desayuno. — viktor cambió el tema con una relajada sonrisa en su rostro, tomando al japonés de la cintura.
— por el amor de los patines viktor, ¿hiciste Katsudon?— yuri se levantó de la cama, camiando entre pequeños pasos hasta la cocina, sirviéndose zumo de naranja.
— así es. — viktor le guiñó el ojo, bostezando.
— hace unos meses no comemos katsudon, ya extrañaba ese olor. — se sentó en una de las sillas de la barra, tomando un trago de zumo. — cierto, ¿a qué hora programaste la cesárea?
— a las nueve de la tarde, era la única hora disponible. El doctor está muy ocupado, y si todo sale bien en dos días podrás salir con mi princesa en brazos. — viktor le sirvió su desayuno, acompañado de una rosa decorativa, era un día especial.
— es una buena hora de todos modos. Por cierto, te faltó poner más mantequilla.
— lo sé, pero me dio pereza comprar más.
(...)
— me duele la cabeza. — el azabache hizo una pequeña mueca en su rostro, se le veía nervioso, por todo lo que sucedería ese día.
— veamos una película, te prepararé un té, nada de cafeína hasta que mi nena nazca. —viktor tomó los dos platos donde ambos habían tomado el desayuno, llevándolos a la barra de cocina. Tomó dos sobres de té, calentando agua en la estufa.
— supongo que es el estrés de todo últimamente. — el azabache se levantó de donde se encontraba, dirigiéndose hacia el sofá de la sala, dispuesto a buscar una película por ver en un intento de distraer su mente de los nervios que lo consumían.
— supongo.
(...)
por parte de yuuri y otabek, ambos seguían en la cama, no tenían la costumbre de despertar temprano desde que la espera de sus bebés llegó, había un desequilibrio en sus rutinas que da de qué hablar. El rubio despertó de golpe, sentándose en la cama con una expresión de susto, levantándose sin cuidado de la cama donde ambos dormían, la cual era pequeña. El moreno despertó de igual forma, algo perturbado por las acciones del rubio, quien gritaba murmurando cosas en voz baja.
— ¿qué sucede? — otabek, completamente adormilado, se limitó a mantenerse sentado en el borde de la cama, sin comprender mucho lo que sucedía. No recibió respuesta alguna, más que un grito más. — yura, ¿qué sucede? me estás asustando.
— recordé que hoy nace sarah, lo olvidé por completo.
— ¿quién es sarah? ¿te refieres a la hija de viktor y yuri?
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¡Hicimos Historia! Yuri!!! On Ice.
Fanfictiondespués del Grand Pix Final, yuuri y viktor decidieron formalizar su relación en privado, entre sus planes a futuro y el proceso de aprender a amarse el uno al otro, no contaron con la inesperada noticia que recibirían, y cambiaría su vida por compl...