Siempre a tu lado (Harry Potter y tu)

Cornelius Fudge

Narradora Feliz 😊:

Harry, Ron, Hermione y ____ siempre han sabido que Hagrid siente una desgraciada afición por las criaturas grandes y monstruosas. Durante el curso anterior en Hogwarts han intentado criar un dragón en su pequeña cabaña de madera, y pasar mucho tiempo antes de que puedan olvidar al perro gigante de tres cabezas al que han puesto por nombre Fluffy. Harry esta seguro de que si, de niño, Hagrid se enteró de que hay un monstruo oculto en algún lugar del castillo, hizo lo imposible por echarle un vistazo. Seguro que le parece inhumano haber tenido encerrado al monstruo tanto tiempo y debía de pensar que el pobre tenía derecho a estirar un poco sus numerosas piernas. Puede imaginarse perfectamente a Hagrid, con trece años, intentando ponerle un collar y una correa. Pero también esta seguro de que él nunca a tenido intención de matar a nadie.

Harry casi a preferido no haber averiguado el funcionamiento del diario de Ryddle. Ron, ___ y Hermione le piden constantemente que les cuente una y otra vez todo lo que ha visto, hasta que se cansaba de tanto hablar y de las largas conversaciones que siguen a su relato y que no conducen a ninguna parte.

____: A lo mejor Ryddle se equivocó de culpable.

Hermione: A lo mejor el que atacaba a la gente era otro monstruo...

Ron: ¿Cuántos monstruos creen que puede albergar este castillo? —les pregunta, aburrido.

Harry: Ya sabíamos que a Hagrid lo habían expulsado —dice, apenado—. Y supongo que entonces los ataques cesaron. Si no hubiera sido así, a Ryddle no le habrían dado ningún premio.

Ron intenta verlo de otro modo.

Ron: Ryddle me recuerda a Percy. Pero ¿por qué tuvo que delatar a Hagrid?

Hermione: El monstruo había matado a una persona, Ron —contesta.

Harry: Y Ryddle habría tenido que volver al orfanato muggle si hubieran cerrado Hogwarts —dice—. No lo culpo por querer quedarse aquí.

___: Debe ser muy feo estar en un orfanato—suspira.

Ron se muerde un labio y luego vacila al decir:

Ron: Tú te encontraste a Hagrid en el callejón Knockturn, ¿verdad, Harry?

Harry: Dijo que había ido a comprar un repelente contra las babosas carnívoras —dice con presteza.

Se quedan en silencio. Tras una pausa prolongada, Hermione tiene una idea elemental.

Hermione: ¿Por qué no vamos y le preguntamos a Hagrid?

Ron: Sería una visita muy cortés —dice—. Hola, Hagrid, dinos, ¿has estado últimamente dejando en libertad por el castillo a una cosa furiosa y peluda?

____: Y creo que será muy vulgar de nuestra parte decirle eso, aparte casi no tenemos pistas si fue él quien abrió la Cámara de los Secretos hace 50 años.

Al final, decidieron no decir nada a Hagrid si no había otro ataque, y como los días se sucedieron sin siquiera un susurro de la voz que no salía de ningún sitio, albergaban la esperanza de no tener que hablar con él sobre el motivo de su expulsión. Ya habían pasado casi cuatro meses desde que petrificaron a Justin y a Nick Casi Decapitado, y parece que todo el mundo creía que el agresor, quienquiera que fuese, se ha retirado, afortunadamente. Peeves se a cansado por fin de su canción ¡Oh, Potter, eres un zote!; Ernie Macmillan, un día, en la clase de Herbología, le pide cortésmente a Harry que le pase un cubo de hongos saltarines, y en marzo algunas mandrágoras montaron una escandalosa fiesta en el Invernadero 3. Esto puso muy contenta a la profesora Sprout.