Siempre a tu lado (Harry Potter y tu)

La Comprobación de las varitas mágicas

Narradora feliz de verse de nuevo con su pandacornio 😍🐼🦄:

Al despertar el domingo por la mañana, a Harry le cuesta un rato recordar por qué se siente tan mal. Luego, el recuerda de la noche anterior estuvo dándole vueltas en la cabeza. Se incorpora en la cama y desrecorre las cortinas del dosel para intentar hablar con Ron y explicarle las cosas, pero la cama de su amigo se haya vacía. Evidentemente, había bajado a desayunar.

Harry se viste y baja por la escalera de caracol a la sala común. En cuanto aparece, los que ya han vuelto del desayuno prorrumpieron en aplausos. La perspectiva de bajar al Gran Comedor, donde estará el resto de los alumnos de Gryffindor, que lo trataran como a una especie de héroe, no lo seduce en
absoluto. La alternativa, sin embargo, es quedarse allí y ser acorralado por los hermanos Creevey, que en aquel momento le insisten por señas en que se acercara. Camina resueltamente hacia el retrato, lo abre, traspasó el hueco y se encuentra de cara con Hermione y __________.

Hermione: Hola —saludó ella, que llevaba una pila de tostadas envueltas en una servilleta—. Te hemos traido esto...

__________: ¿Quieres dar un paseo?

Harry: Buena idea —le contesta, agradecido.

Bajan la escalera, cruzaron aprisa el vestíbulo sin desviar la mirada hacia el Gran Comedor y pronto recorren a zancadas la explanada en dirección al lago, donde está anclado el barco de Durmstrang, que se refleja en la superficie como una mancha oscura. Es una mañana fresca, y no deja de moverse, masticando las tostadas, mientras Harry le cuenta a Hermione qué es exactamente lo que había ocurrido después de abandonar la noche anterior la mesa de Gryffindor, más específico que _________. Para alivio suyo, Hermione aceptó su versión sin un asomo de duda.

Hermione: Bueno, estaba segura de que ustedes no se habías propuesto —declara cuando él terminó de relatar lo sucedido en la sala—. ¡Si hubieras visto las caras que pusieron cuando Dumbledore leyó sus nombres! Pero la pregunta es: ¿quién lo hizo? Porque Moody tiene razón, Harry,  no creo que ningún estudiante pudiera hacerlo... Ninguno sería capaz de burlar el cáliz de fuego, ni de traspasar la raya de...

Harry: ¿Has visto a Ron? —la interrumpe.

Hermione dudó y mira a __________ y ella asiente soltando un suspiro pesado.

Hermione: Eh... sí... está desayunando —dijo.

Harry: ¿Sigue pensando que yo echamos nuestros nombres en el cáliz?

___________: Intenté hablar con él, pero lo que recibí fueron gritos de: eres una mentirosa, sólo quieres ser el centro de atención, y muchos cosas más malas—suspira—. Ya me esperaba esa reacción de parte de él.

Hermione: Bueno, no... no creo... no en realidad —contesta con embarazo.

Harry: ¿Qué quiere decir «no en realidad»?

Hermione: ¡Ay, Harry!, ¿es que no te das cuenta? —dice—. ¡Está celoso!

Harry: ¿Celoso? —repite sin dar crédito a sus oídos—. ¿Celoso de qué? ¿Es que le gustaría hacer el ridículo delante de todo el colegio?

__________: Calmate, Harry.

Hermione: Mira —le explica armándose de paciencia—, siempre eres tú el que acapara la atención, lo sabes bien. Sé que no es culpa tuya —se apresura a añadir, viendo que Harry abrir la boca para protestar—, sé que no lo vas buscando... pero el caso es que Ron tiene en casa todos esos hermanos con los que competir, y tú eres su mejor amigo, y eres famoso. Cuando te ven a ti, nadie se fija en él, y él lo aguanta, nunca se queja. Pero supongo que esto ha sido la gota que lleno el vaso...