-¡Jarek cúbrete! -me di la vuelta y observé el librero. Eso era sumamente vergonzoso.
Lo escuché reír a carcajadas.
-¡No es gracioso! ¡Vístete ya! -volví a pedir.
-Debiste ver tu cara -escuché como abría el clóset -creo que viste a mi demonio.
Suspiré y tapé mi cara con mis manos, estaba llena de mucha vergüenza.
-Eres un degenerado ¿por qué andas desnudo?
-Porque es mi casa -dijo obvio.
-Supongo que tengo la culpa por entrar así... -quité mis manos aún observando los libros.
-En eso estamos de acuerdo -dijo en ese mismo tonito.
-Como sea Jarek, ¿ya te vestiste? -pregunté.
-Ya -dijo en una forma que no supe discernir si era verdad o no. -¿Me estás mintiendo? -le pregunté.
-Podrías voltearte y comprobarlo por ti misma -jugueteó.
-Saldré de espaldas -empecé a caminar mirando solo la pared.
-¿Qué tiene de malo que me veas desnudo?
-¿En serio me estás preguntando eso? -bufé.
-Ven aquí -lo escuché decir y enseguida sentí como me giraba para encararme...
Suspiré dejando salir todo el aire de mis pulmones.-¿Puedes soltarme? -dije aliviada de que tuviera ropa.
-Claro -alejó sus manos y sonrió con grandeza.
-Eres un tonto -le dije de mala gana.
-Muy sexy -sonrió malicioso.
-Ya basta -me acerqué a su mesita, tomé la taza de café y se la di -date prisa ebrio.
Jarek tomó un sorbo.
-Y no me contaste, ¿qué te dije mientras estaba borracho? -me observó directo a los ojos.
-Después de como me has tratado, no te diré -me dejé caer en su cama.
-¿Quién te volvió tan mala? -se sentó junto a mí.
-Tú -dije sincera y él solo sonrió feliz de mi respuesta -mejor dime ¿con quién iremos hoy?
-Irás con el demonio de la pereza, Luca.
-¿Iré? -fruncí el ceño -¿qué hay de ti?
-Tengo que hacer un trabajo para el jefe -hizo una mueca de desagrado -pero no te preocupes, Luca es el demonio más tranquilo que puedes conocer aunque seguro te aburrirás con él o tal vez no...a veces llega a ser igual o más aburrido que tú.
-Gracias -dije con ironía.
-Estarás bien -me guiñó el ojo.
-Bueno -no estaba convencida de su idea pero me resigné.
-Entonces te acompañaré a su casa -se levantó y de inmediato lo seguí.~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-Luca y yo nunca hemos sido muy amigos -me comentó Jarek mientras caminábamos por aquellos rumbos bajo el cielo anaranjado.
-¿Por qué? ¿Solo por ser menos como tú? -bromeé.
-Exactamente por eso -sonrió divertido -es tan apático que ni siquiera tú podrás hacerle conversación.
-Claro que podré, he tratado con personas apáticas. Mi amigo Asher era así pero terminó cediendo ante mi amabilidad y obstinación.
-Claro, Asher -lo vi hacer una mueca extraña pero le resté importancia.
-En fin, verás que me llevaré igual de bien con él que con Benedict.
-Ya veremos -sonrió malicioso. No dije más, solo seguimos caminando por las calles....
No mucho tiempo después Jarek me condujo a una casa que debía admitirlo, se veía bastante descuidada por fuera.-Esta casa es... está un poco desatendida.
-Y eso que no has visto el interior.
Suspiré y Jarek tocó la puerta. Unos minutos después Luca salió hecho un lío. Su cabello estaba despeinado y su ropa arrugada.
-Hola Luca -Jarek lo saludó.
-Hola -el chico parecía totalmente desganado.
Hubo un pequeño silencio entre los tres.
-Bueno -me sonrió Jarek -te quedas con mi buen y aburrido amigo -entonces simplemente se esfumó.
-Creí que el estaría aquí -dijo Luca en un casi inaudible susurro.
-Dijo que tenía trabajo -le sonreí.
-Ah...-pareció darle igual -pasa.
Lo vi entrar con total calma y lo seguí.
Oh rayos. Su casa estaba hecha un chiquero.
-Lindo lugar -intenté sonreír.
-No te esfuerces en fingir -caminó a la parte de arriba y yo lo seguí. -No fingo, es lindo...pero tal vez deberías limpiar más.
-Eso me da pereza.
-¿Y por qué no contratas a alguien que lo haga por ti?
-Eso es igual de tedioso -entró en una habitación y lo seguí.
Mi primera impresión fue el doble de mala que antes.
Ese cuarto en particular tenía más basura, telarañas y suciedad que la que hubiera visto alguna vez en una casa habitada.
-Necesito dormir un poco más -se arrojó sobre su cama.
-D-De acuerdo -aparté un poco de basura de una silla y me senté -¿y qué hago yo?
-Puedes dormir también, hay muchas habitaciones más -cerró los ojos.
Jarek tenía razón. Ese demonio era realmente flojo. Entonces tuve una idea.
-O podría limpiar un poco -sonreí.
-Si quieres... -susurró para inmediatamente empezar a roncar.
-Okey -me levanté y esquivé la basura saliendo de su cuarto. Después caminé por los pasillos y llegué hasta la, un poco menos sucia, cocina. Rebusqué en los cajones hasta encontrar unas bolsas negras para basura, tomé una escoba y un recogedor, y me dirigí nuevamente a la habitación donde dormía Luca.Empecé a recoger botellas de agua, envolturas de frituras, ropa sucia...
-Eres un desastre demonio de la Pereza -sonreí apenada por la situación.
Por un momento lo observé pero él seguía durmiendo. Seguí recogiendo su habitación como por media hora más hasta que por fin terminé y me dirigí a la sala y después a la cocina.
...
Y por fin.
Por fin después de casi cinco horas de lucha contra toda esa sociedad había terminado de limpiar la mayoría de la basura de su casa.
Me lancé sobre un sofá ahora limpio y suspiré.
¿Por qué hasta los demonios podían llegar a tener tal desorden?-¿Cómo lo hiciste? -la bocesilla de Luca se escuchó por las escaleras -a mi me hubiera tomado media eternidad limpiar todo.
Reí.
-Fue difícil pero no es para tanto. -Aún así, gracias -bostezó.
-De nada.
Escuché un gruñido proveniente de su estómago.
-¿Tienes hambre? -lo observé.
-Un poco -se sentó junto a mí.-¿Te preparo algo de comer? -le sonreí.
¿No te molesta cuidarme tanto? -Para nada -me levanté de inmediato y puse mis manos en la cintura -ahora somos como familia...claro si tú piensas lo mismo.
-Creo que si -siguió en su posición desganada -en realidad me da igual si estás aquí.
Por un segundo me entristecí de que pensara así.
-Pero parece igual de perezoso ser un humano o un demonio, y si a ti te gusta estar aquí con tu tío Dimitri, está bien.
-Que bien que a ti no te importe que soy media humana - sonreí -¿y... qué te gustaría comer?
-Hamburguesas -soltó rápidamente.
-Bueno...-me sorprendí -pero ¿seguro que no quieres algo más hogareño?
-No me gusta la comida muy elaborada.
-De acuerdo, iré a tu cocina...¿me ayudas?
-Eso me da...
-Flojera -reí -ya lo sé. Ya estoy aprendiendo eso de ti y no te preocupes, en cuanto esté lista te avisaré.
-Gracias.
Nuevamente caminé a su cocina y empecé con la que me había pedido. Realmente no era la mejor cocinando pero mientras mi papá y yo vivimos solos él me enseñó a cocinar. Tomé los ingredientes típicos para una hamburguesa sencilla y comencé......
-¡Lista! -salí a la sala después de varios minutos, con su comida y la dejé sobre una mesa de madera. Luca tenía por primera vez tenía una cara que no era de flojera.
Sus ojos y boca demostraban mucha sorpresa.
Sin decir nada tomó la hamburguesa entre sus manos y la mordió.
-Es...-no terminó su frase.
-¿No te gustó? -me sentí mal.
-Me gustó -me dedicó una sonrisa casi invisible -es que solo había probado comida tan buena de dos demonios...
Sonreí ante tal halago.
-¿Y se puede saber de quién?
-De Jarek y de una chica llamada Lira.
-¿Jarek? -pregunté extrañada.
Asintió.
-Tal vez algún día te deje probar sus delicias.
-Tal vez -reí y recordé a esa otra persona -¿la chica llamada Lira es la que trabaja con mi tío?
Asintió.
-Ah si -sonreí -ella y yo hablamos una vez de ti.
-¿De mí?
-Si...ella dijo que tu eres muy amable y a mí me dio la impresión de que le gustas.
Me pareció ver un leve sonrojo.
-A mí... me gusta -mordió su hamburguesa y yo no pude evitar sentir ternura al ver ese amor tímido pero correspondido.
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Demonio
Romance"El infierno puede ser divertido si estás con el demonio correcto". -Tú me invocaste -me observó con una sonrisa realmente atractiva y llena de malicia -ahora disfruta las consecuencias. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ Lauren es una chica con una vida norm...