No podía parar de llorar, las lágrimas solo brotaban con desesperación mientras mi cuerpo temblaba sin ningún control.
Yo no había querido matarlo, solo detenerlo.
Me volteé y vomité.Una y otra vez seguí viendo el cadáver mientras yo respiraba con dificultad.
De pronto una cálida mano tomó la mía.
Observé a Jarek.-No fue tu culpa ¿entiendes? -se oía sumamente cansado y aturdido - tenemos que irnos Lauren.
Me limpié las lágrimas con la otra mano y entonces lo ayudé a levantarse.
Tenía razón, lo primordial era salir de allí.
Entonces Jarek casi se cae cuando dio los primeros pasos.
-Cuidado -pasé su brazo por detrás de mi cuello y apresuré el paso, antes de que el fuego nos encerrara por completo...Desde afuera el pequeño lugar ardía con potencia, el oscuro paisaje se iluminaba con esa lumbre tan desagradable, a lo lejos ya podía escuchar la sirena de los bomberos.
Seguimos caminando hasta atravesar la iglesia y después salimos de allí.
Fuera, el automóvil de Jarek se encontraba aún en su lugar. Con rapidez lo apoyé en la puerta.
-Ten -Jarek me entregó las llaves de su auto.
Las tomé y abrí la puerta, lo dejé caer en el asiento del copiloto y yo subí en el del conductor.-Vámonos ya -susurró.
-Si -arranqué con mano temblorosa mientras volvíamos al hotel.~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Todos en los pasillos del hotel debieron pensar que Jarek estaba borracho pues solo se tambaleaba mientras yo lo ayudaba a llegar al cuarto.
Y por fin lo logré tumbar en la cama.-¿Estás mejor? -le pregunté mientras me sentaba a su lado.
Jarek abrió los ojos e intentó sonreír como siempre lo hacía.
-Claro que si cariño, gracias.
-De nada -recordé lo horrible que había hecho y me tumbé a su lado, apretándolo con fuerza -...lo maté.
-No fue tu culpa.
-Lo fue...si no hubiera hecho algo tan estúpido...
-Si no lo hubieras hecho estaríamos muertos.
Me quedé callada por un segundo.
-Hay que dormir -dije.
Jarek no dijo más.
Entonces unas lágrimas salieron de mis ojos e intenté ahogar mi llanto.
¿Qué había hecho?~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~
Me levanté sin haber descansado ni un poco.
Jarek dormía, al menos él ya se veía mejor.
Me dirigí al baño y me duché...¿Me iría al infierno después de lo que hice? Pero que pregunta más tonta me hacía, la respuesta era obvia, si.
...Salí del baño, Jarek seguía recostado.
-Buenos días humanita.
De inmediato volteé al escuchar su voz.
-Buenos días -me senté a su lado -¿te sientes mejor?
-Si -me observó con sus oscuros ojos -¿y tú?
-Yo estoy bien -mentí y me levanté de allí -¿quieres comer algo? Puedo ir a la calle y conseguir un café caliente o...-
Jarek me tomó de la mano y me miró serio.
-Ya te dije que no fue tu culpa.
-Lo sé -sonreí débilmente.
Jarek en un arranque se levantó con dificultad y me miró frente a frente.
-Soy un experto en identificar mentirosos.
-Se me pasará, no te preocupes.
-Asesinaste a una persona, eso no solo se "pasa".
Miré a otro lado.
-Lauren sabes que fue necesario ¿no? -volvió a hablar.
-No quería matarlo -lo miré con ojos cristalinos -solo quería que nos dejara ir...
-Lo entiendo.
Lo abracé con demasiado fuerza.
-Cuidado -se rió -aún estoy delicado.
-Perdón -me alejé y respiré hondo -¿te puedo hacer una pregunta?
No dijo nada así que lo tomé como un si.
-Quiero saber si... si iré al infierno por lo que hice.
Nuevamente hubo silencio.
-Sabes que yo no decido eso.
-Pero los asesinos siempre pagan ¿no? -bajé la mirada.
Jarek apretó fuertemente mis mejillas.
-Auch eso duele -fruncí el ceño.
-Eres la persona más buena que he conocido y aunque lo niegues me salvaste por amor -sonrió -nadie va al infierno por eso.
-No lo hice por amor. Te recuerdo que si tú mueres yo muero.
-Que poética.
-Sabes que es algo literal.
-Igual es amor...a la vida.
-Jamás pensé que dirías algo como eso -reí y aunque no se lo dijera aquello me tranquilizó un poco.
-Lo sé, es un fastidio -rodó los ojos -pero tú lo necesitabas.
Sonreí levemente.
-¿Y ahora qué haremos? -pregunté.
-Pues...esos malnacidos intentaron matarme y con todo eso, no pude averiguar nada del sujeto... supongo que por el bien de tu salud mental, regresaremos.
-Está bien -me senté en la cama y una duda surgió -ahora me dirás ¿cómo planeaban asesinarte?
-Arriesgaste tu vida por mí, así que te diré -guardó silencio un momento -en cuanto desayunemos -entonces salió del cuarto.De mala gana lo seguí a la planta baja donde nos dijeron servían muy buenos platillos.
...
Unos minutos después nos encontrábamos sentados junto a la entrada comiendo unos wafles.
Por suerte no había casi nadie, salvo los empleados y unas cinco personas desayunando.
-Dime Jarek -insisití.
Jarek se metió un bocado a la boca y miró al otro lado.
¿En serio no me diría?-¿Oíste lo que pasó en la iglesia? -le dijo una mujer a otra que pasaba por allí.
-¡Si! ¡pobre Padre era un ser tan bueno! -se lamentó.
Yo solo las observé.
-La policía no tiene ni idea de cómo se inició el incendio que le arrebató la vida.
-Lamentable -suspiró -Dios bendiga a tan buen ser -la mujer se persignó y siguió charlando de algo más que no era de mi incumbencia.Bien, ahora me sentía peor.
Seguí comiendo mi desayuno mientras Jarek solo me miraba, seguramente también se había dado cuenta...Todo el desayuno nos mantuvimos callados hasta que al terminar salimos a caminar a un parque cercano.
-Creo que ahora confío un poco más en ti -me dijo de pronto -el agua bendita hace daño.
Observé su rostro que aún estaba irritado.
-Si, eso lo noté -toqué mi propio rostro.
-¿Viste la piedra preciosa que tenía el Cura?
Asentí recordando distantemente haber visto algo rojo en sus manos.-Esa cosa estaba bendecida por lo que solo tenía que clavarla en mi corazón y después quemar mi cuerpo, con lo cual le ayudaste al incendiar el lugar.
-¿Y yo cómo iba a saber? -fruncí el ceño.
-Ya no importa.
-Y si eso hubiera pasado, si te hubiera matado en ese mundo ¿habrías vuelto a tu hogar? -seguí preguntando.
-No, hubiera desaparecido por siempre.
-Me alegro de que eso no haya pasado...
Sonrió malévolo.
-Ya que nos estamos sincerando -me obligó a sentarme en una banca -es hora de que me digas tu peor miedo.
-No -negué rápidamente.
-Anda, ya tenemos más confianza ¿no? -sonrió coqueto.
Lo observé con seriedad.
-Bien, solo porque tú me dijiste algo tan serio como eso... -apreté mis manos y comencé -desde que mi mamá murió ese miedo me surgió, incluso tuve que ir a un psicólogo -sonreí apenada al recordar aquellas fechas.
-Ajá -chasqueó los dedos -tienes miedo a la muerte.
-No -negué nuevamente -bueno me afectó haber perdido a mi mamá pero lo que más me destrozó fue lo que vino después de eso... Mi papá y yo queríamos dejar eso atrás -Jarek solo me miraba con curiosidad -y lo hicimos con el tiempo, pero nos costó -suspiré nostálgica -después de un tiempo llegaron Amelia y Luce y formamos una "familia". Después todo estaba tranquilo y llegaste tú -lo observé -y me hiciste moverme de mi zona de confort y ahora estoy tan diferente...ni siquiera me reconozco.
-Ya comprendo.
-Si, supongo que ya lo sabes -lo observé -no es algo muy común o algo impactante pero le tengo miedo al cambio, a lo que está por venir y que no puedo controlar.
Jarek miró los árboles.
-No me sorprende tanto... eres muy tranquila en todos los sentidos e incluso eres calculadora cuando te conviene.
-¿Yo?
-Eres sensible no lo dudo pero le apuntaste a un religioso y le disparaste a otro hombre sin dudarlo porque querías seguir viva. No podrías haberle tenido miedo a algo tan barato como los payasos o las arañas...por eso desde que te conocí me cautivaste, me pareciste uno de los seres más curiosos que he conocido.
-G-Gracias... supongo -reí apenada.
-Y me alegra que durante todo este tiempo he logrado perturbarte de tal manera -sonrió superior.
-Que soberbio eres...pero ya que tú mismo dijiste que nos estamos sincerando...
-No te lo diré -sonrió malicioso.
-Ya sé que no me dirás tu miedo, nunca creí que lo harías.
-¿Y entonces qué quieres saber?
-Es más algo que te quiero confesar.
-Ya sé que te resulto sumamente atractivo -bromeó.
-No es eso -le di un golpecito.
-¿Algo pervertido que has pensado?
-Tampoco.
-¿Entonces?
-¿Recuerdas la vez que te desmayaste?
-Si -me miró con curiosidad.
-Sé que pasó ese día.
Soltó una carcajada.
-No tienes forma de saberlo a menos que... -me observó.
-A menos que haya estado allí...en tu hogar...junto a ti y junto a tu papá.
Su cara se descompuso.
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Demonio
Romance"El infierno puede ser divertido si estás con el demonio correcto". -Tú me invocaste -me observó con una sonrisa realmente atractiva y llena de malicia -ahora disfruta las consecuencias. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ Lauren es una chica con una vida norm...