Capítulo 41 [El amor es de tontos]

11.6K 1.3K 1K
                                    

Jennie Inahala y exala desesperadamente Mientras guarda reposo en él sofá de su sala, mirando con ojos perdidos él techo sobre ella, pensando solamente en como entenderse a si misma, por que aun si había entendido que verdaderamente ama a lalisa, aun no sabia que debía hacer. Cierra los ojos buscando consuelo en algun recuerdo, sin embargo su mente tan solo le traiciona recordándole la sonrisa de su padre.

Siente su corazón ser oprimido al recordar al mayor, aquel hombre que le cuido de pequeña y le hizo ser la niña mas feliz del universo.

—Como te extraño padre...—Susurra melancólica mientras su corazón se rompe un poco al recordar su voz.

No busques él rostro mas bonito, si no él corazón mas hermoso"
Recordó las palabras de su padre cuando apenas era una niña que se negaba en sentir amor por los demás.

“Me gusta tu corazón padre, No quiero mas"
Recordó haberle dicho al mayor mientras aquel solo le sonreía dulcemente acariciándole la mejilla.

A mi él tuyo nini, Pero algún día, conocerás a alguien que te hará latir fuerte él corazón, Alguien que sera muy especial para ti y con él que conocerás él verdadero significado de la palabra amor"
Jennie recuerda a ver negado rápidamente, frunciendo él ceño antes de asquearse por eso.

El amor es de tontos padre, Jamas amare a alguien que no seas tu"
Se acordó de sus mismas palabras, sonriendo con inocencia por lo dicho cuando aún era niña.

“Esta bien jen, jen Yo también te quiero"
La sonrisa del mayor Es grande al mirar a aquella linda niña ante sus ojos.

La castaña tan solo siente sus ojos húmedos, abriéndolos de par en par para sentir como su corazón se rompe un poco mas al desaparecer la imagen de su padre en su mente, queriendo un abrazo de él, quizás él sabría que hacer.

Suspira mientras limpia las pequeñas gotas de sus ojos, dirigiendo su mirada hacia las escaleras, manteniendo su esperanza en ver bajar a lalisa y escuchar su molesta voz mientras le pregunta por que llora.

Pero ella no bajo.

Recuerda a verle visto llegar ayer con una chica, no pudo diferenciar su rostro pero la sonrisa de lalisa le hizo arder su corazón. Se había escondido para que la rubia no le viera y al verla entrar noto aquel suspiro, ¿Quien era aquella?. Estaba celosa, por supuesto que lo estaba, que alguien provocara eso en la menor ya le era suficiente para sentir enojo.

Lleva una mano hasta su corazón sintiendo como aquel latía con fuerza al recordar la sonrisa de la rubia, al recordar su voz y su rostro dulce.

Ha esto te referías padre...—Murmura para si misma, mientras los latidos de su corazón aun resuenan.—Ya e conocido a mi persona especial, mi verdadero amor..—Sonrie inconsciente, mientras sus ojos vuelven a nublarse. —Lisa...—Susurra él nombre de la menor y sus latidos se alteran.

Mi odiosa hermanastra [Jenlisa] [Finalizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora