Jennie camina cabizbaja mientras él frío golpea su suave rostro haciéndole temblar, Él clima de igual modo luce apagado como cada espacio de su corazón que sólo duele. Se había despertado temprano pese a que toda la noche se la había pasado llorando, pensaba en que quizás él despertar al día siguiente su pena seria menos dolorosa en compañía de su muy amada novia, pero no fue así.
Tras vestirse y disponerse a darle los buenos días a la menor, esta se había marchado ya al colegio sin importarle, despertar u avisar a jennie, así que la castaña se dispuso a caminar por la nublada mañana en seul. Se sentía rota y aunque la esperanza de ser consolada por la menor aun permanecía allí, su corazón solo dolía.
Se adentro al colegio buscando con la mirada la silueta de la menor, sin embargo su búsqueda fue en vano al no encontrarle, teniendo por ultima opción él esperar a verla en él receso, así mismo se dirigió a su aula, sintiéndose mal por él no saber en que aula le tocaba a la menor y así poder encontrarla mas fácil. Toma asiento, a lado de su mejor amiga quien solo dormia gustosa sobre su pupitre.
—¡Nayeon!—le llama golpeando su cabeza para hacer que su mujer amiga se despertara, sin embargo la chica parecía estar sumida en él sueño.—¡Nayeon!—Vuelve a decir, Moviendo él asiento de la chica asiendo que se levantara de golpe.
—¡Hey, esta temblando!—Grita levantándose de su pupitre, saliendo corriendo mientras todos le miraban.—¡Niños y mujeres primero!—Continuo gritando mientras se alejaba corriendo, Así que jennie solo reviro los ojos.
Riendo para si misma, creyendo en lo loca que esta su mejor amiga, fijando su mirada en él campo que estaba cubierta por una pequeña neblina blanca, acompañada del frío que le hacia temblar, pensaba en lo triste que era todo, Aun pese a que sentía que debería continuar sin su cachorro, había algo que le hacia sentir que todo no iba tan bien.
Quizás solo era su imaginacion.
Pero sus pensamientos y sentimientos fueron interrumpidos por aquella hermosa chica que le miraba, parada justo delante de ella, jennie enfoco su mirada, sin dejar de ver como él rostro de Irene era un poco tímida al mirarle.
—¿Se te ofrece algo? —Cuestiona en cambio cuando la pelinegra es incapaz de hablar.—¿Vas a quedarte callada como la otra vez?—Continua cuestionando, limitándose a mirarle serena, siendo ajena en como aquellos ojos se iluminan tras escucharle.
Ella le recordó
Piensa Irene, sonríendo en sus adentros.—Jennie, en realidad quería pedirte una cosa —Habla al fin y la castaña solo enarca una ceja, mirándole confusa. Preguntándose así misma él por que Irene teniendo de amiga a la magnífica Seulgi, le pedía algo a ella.—Hoy, en la salida, podrías acompañarme a un lugar..
—¿Yo? —Inquiere, dudosa.—¿Para que o que?—Cuestiona, sin apartar su vista.—No te conozco, nisiquera se por que me hablas, ¿Por que haría algo como eso?
—Por que yo...—Baja la mirada, jugando con sus manos apenada.—Solo hazlo, ¿Si? —Pide, mirándole con aquellos ojos tiernos.—Quiero mostrarte algo que se que te hará muy feliz —Inquiere aun sin mas.—Te espero en la salida ¿Si?—Jennie aun dudosa solo asiente y así mismo Irene se marcha dejándole con aquella duda.
Le ve alejarse y hasta ese punto solo sonríe por recordar él como le conoció, quizás Irene siempre fue incosiente, pero esta segura de a verle visto mirándole como si jennie fuese un mundo, su mundo. No le dio importancia y solo soltó una pequeña carcajada al ver a su mejor amiga entrar mirándole con enojo.
—¿Que paso nayeon?—Cuestiona entre risas.—¿No estaba temblando?—Se burlo de ella y así mismo aquella chica solo le fulminó con la mirada.
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Mi odiosa hermanastra [Jenlisa] [Finalizado]
Fanfic~Del odio al amor solo hay un paso~ Tras la muerte del señor kim, jennie cambia volviéndose una chica solitaria y reservada odiando todo aquello que antes le causaba alegria, debido a su cambio la señora kim decide adoptar a otra chica de nombre lal...