Idols×Idols

》Sehun×Tzuyu《

Tzuyu, la dulce y bella Tzuyu, era la chica más linda  y tierna que nunca nadie había conocido y dentro del campus tenía la fama de ser una "rompe corazones sin querer serlo"

A ella no le importaba tener novio, era tímida con los chicos y por esa razón rechazaba a todo chico que trataba de acercarse a ella, pero había algo que todo el mundo desconocía. Ella no era ni pura, ni mucho menos inocente.

Ella era todo lo contrario

— Muy bien Tzuyu ¿Verdad o reto?. — La chica hizo una mueca mientras escribía en su libreta

—Verdad

— ¿Te gusta Sehun? —Tzuyu casi moría atragantada por su propia saliva.

— ¿Sehun? ¿Quién es Sehun?

— El chico rudo. —Tzuyu fingió demencia  -—El profesor de mecatrónica.  —Ella negó sorprendiendo a sus amigas. — Vamos Tzuyu siempre nos lo encontramos en la cafetería y siempre usa esos jeans ajustados que tanto comentamos —Tzuyu seguía fingiendo inocencia.

Por supuesto que conocía al profesor de mecatrónica y muy bien.
La vez que lo conoció fue en el ascensor del campus a las diez y media de la noche cuando casi nadie estaba en los edificios y sólo eran ellos dos.
Cuando aquel pelinegro se colocó a su lado en ese pequeño espacio, Tzuyu quería morir de vergüenza, jamás había tenido tan cerca al querido profesor Oh Sehun y  recordaba perfectamente que ella tenía que llevar  unos documentos al segundo piso y Sehun tenía que ir al tercero.
Esa noche por cosa del destino, habían quedado atrapados durante tres horas en el ascensor.

Comenzó a ruborizarse con sólo recordar todo lo que ocurrió dentro de este.

Una sonrisa coqueta que sorprendió a la inocente castaña.
Unos cuantos cumplidos hacía su persona.
Una extraña confesión y unas insinuaciones que en ese entonces la castaña desconocía y pasaba por alto.

Esa noche, en aquel ascensor,  Zhou Tzuyu terminó cediendo al sensual profesor de mecatrónica.  

— Mejor reto. —Carraspeó su garganta, incómoda y con las mejillas más rojas que la pluma que tenía en sus manos.

Sus amigas se miraron entre sí como si llevarán meses tramando algo.

— Tzuyu siempre  me ha desesperado tu forma de ser con los chicos. —Espetó la mayor de todas. —Y por esa razón, tienes que besar al profesor Oh Sehun .—

Tzuyu no lo podía creer mientras caminaba hacía el taller de mecatrónica y  sus amigas la miraban escondidas.

Sus manos temblaban, su corazón quería salir de su pecho. No tenía porque cumplir el reto, no le importaba que sus amigas se enojaran con ella, o quizás  si, por esa razón estaba en ese solitario taller donde sólo se encontraba un ardiente profesor trabajando en una máquina.

— Se... Sehun. —Su voz fue casi audible para el pelinegro.

El chico alzó la vista abandonando sus herramientas de trabajo. Se veía estupendo, era verdad, siempre lucía guapo sin importar lo que usará.

Cuando sus ojos se posaron en la figura de la castaña le sonrió.

— ¿Pasa algo?

— Necesito besarte. —Soltó de repente.

Sehun entrecerró los ojos notando las mejillas de la castaña ardiendo de vergüenza, esa no era la Tzuyu que conocía. Había algo mal...

— ¿Es una clase de apuesta?. —Tzuyu asintió apenada, mientras sentía su cuerpo acercarse al de ella  —¿Tus amigas saben de lo nuestro?. —Susurró a lo que ella negó. Sehun la examinó un largo pero largo momento, la adoraba demasiado  — Cuándo estés de nuevo en mi apartamento desnuda sobre mi cama, tendrás  un castigo. —Susurró encendiendo sus sistemas  —¿Está bien?.—

— S...si

— Si ¿Qué?

— Si daddy. —La sonrisa  en el rostro de Sehun fue la más sensual que jamás había visto.

— Bien, ven y cumple tu apuesta

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No sé porque amo a esta pareja, son perfectos como los dioses ;-;