SOLO ÉL PODRÁ ACABAR CONMIGO. [Daniel Oviedo]

CAPITULO 46

Me despierto con el cuerpo de Kate encima. La aparto poniéndola a un lado de la cama y tapándola con la manta. Cojo el móvil y salgo de la habitación. Recuerdo que ni mamá ni papá están hoy en casa asi que la tenemos para Kate y yo. En toda la casa hay luz que entra por las ventanas, miro por las puertas de cristal que salen al patio y hace un día de maravilla.

En la cocina desayuno un bol de cereales, enciendo el móvil, veo que tengo tres perdidas de Kat y muchísimos mensajes de texto, la llamo sin mirar mensaje alguno.

- ¿Si? -dice la voz ronca de mi amiga- ¿quien seas puedes irte a la mierda?

- Tan simpática como siempre eh Kat -digo riéndome-.

- ¿Alguna vez te han dicho que llamar a las diez de la mañana es demasiado pronto? -me pregunta aún más dormida que antes-.

- Creo que para hablarte de que ayer tuve una charla con Carlos siempre es buena hora para llamar -digo tranquilamente-.

- ¿Qué? ¿Porqué hablaste con Carlos? -me pregunto-.

- Salí a correr ayer por la tarde, paré para beber agua y cuando fui a sentarme en el banco estaba Carlos, que vino a hablar conmigo- empiezo a explicarle-.

- No habrás hecho alguna estupidez, ¿verdad? -me pregunta y cuando ve que no respondo me pregunta otra vez- Dios Elena ¿qué has hecho?-.

- Bueno, le di una hostia en la cara -digo tranquilamente-.

- ¡¿ELENA ESTEPA COMO SE TE OCURRE!? -me chilla-.

Me aparto el teléfono del oído por la potencia de su voz al decir esas palabras.

- Oye él se pasó no yo -replico yo-.

- Ahora sí que la has cagado nena -me dice Kat-.

- ¿Te importaría quedarte a comer yo con nosotras? Mis padres no están y prefiero ver tu cara de cómo me matas en vez de romperme el tímpano con tus gritos JAJAJA -digo a lo que a ella no le hace mucha gracia-.

- Yo es que te mato eh, en una hora estoy en tu casa -dice antes de colgar-

Acabo de desayunar. El timbre suena, abro la puerta y el cartero me da las cartas de hoy. Me despido de él y cierro la puerta detrás de mi, caminando a la cocina veo que una de ellas va dirigida para mi.

Para mí amiga Elena Estepa.

Al leerlo me quedo con una sensación extraña. Que yo sepa nadie de Barcelona sabe mi dirección así que es imposible que venga de allí. La cojo, le doy la vuelta y la abro. En su interior hay una hoja de papel donde lo único que hay escrito es:

Disfruta de tus navidades, a lo mejor se acaban para siempre.

Art: M

Un escozor empieza a subir por mi garganta, corro hasta el fregadero y vomito hasta que mi cuerpo no puede más. Cuando me doy la vuelta veo a Kate al otro lado de la isla.

- Kate por dios -digo lavándome la toda la cara con agua- me has asustado-.

Cojo una servilleta y me la seco.

- ¿Estás bien? -me pregunta sin moverse del sitio pero con cara de preocupación-.

- Solo se me ha revuelto el estómago -le digo para tranquilizarla-.

Me apoyo en la encimara y recojo las cartas, guardándome la mía.

- En un rato vendrá Kat para estar con nosotras -le informó-.

Veo como se le hace una sonrisa en la cara al escuchar su nombre. Me encanta que desde el primer día se lleven tan bien.

- Genial -dice ella-.

Se levanta y empieza a coger comida para desayunar.

- Estaré arriba cambiándome -le digo desde las escaleras-.

Mi estómago y mi garganta están sufriendo ahora mismo. Al ver la carta se me revuelve aún más el estómago, decido guardarla en el cajón hasta saber que hacer con ella.

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Continuará...😔😷