CAPITULO 53

1K 30 1
                                    

Narra Daniel:
Me reúno con unos colegas para solucionar un problema. Carlos me lleva esperando en Madrid desde esta madrugada y yo sigo en Sevilla. Era fácil lo que tenía que hacer, ir a un bar sentarme en la barra y esperar a que me entregasen el paquete. Luego mandarlo por correo y subirme a ese puto avión, ir con Elena a la fiesta y todo solucionado.

Pero como no, eso no ha sido así. La persona nunca llegó al bar, esperé y esperé pero acabé yéndome. Cuando se lo conté a Carlos no me creyó, y no tenía forma de demostrárselo así que aquí estoy rodeada de gente de mi pasado para que me ayuden a resolverlo.

Intento pensar que hacer antes de que haga alguna estupidez con Elena, porque sé que es capaz de todo por ese paquete.

Camino de un lado a otro sin parar. La espera me está matando por dentro.

- Vale, dice que te espera en el callejón del bar donde quedaste esa noche -dice Alex- a la misma hora-.

Alex es un amigo de mi infancia, lo ayudé varias veces cuando tuvo problemas con la ley así que me está devolviendo el favor. Está en este mundo, así que, averiguó quién tenía que entregarme el paquete y habló con ellos. Lo que hace es muy peligroso, pero no es la primera vez.

- Allí estaré -le digo apoyando mis manos en la mesa-.

- ¿Quieres que alguno de nosotros te acompañemos? -me pregunta acercándose-.

- No, no quiero meteros en líos -digo serio- esto me lo busqué yo mismo-.

Se acerca y me da una palmada en la espalda.

- ¿Sabe esa chica lo que estás haciendo? -me dice-.

Suelto una pequeña carcajada al escuchar su comentario.

- No tiene ni idea -le digo pensando en ella-.

Seguimos hablando de cómo irá el plan, si algo se desmadra ellos me estarán esperando dos calles más abajo del callejón.

...

Cuando llega el momento me visto de negro, me subo la capucha y empiezo a andar hasta el callejón. Una vez allí espero a que vengan para darme el paquete. De lejos dos hombres se acercan hasta donde estoy. Dan una vuelta alrededor mío y uno de ellos asiente con la cabeza.

- Siento mucho que la otra noche no tuvieses el paquete chico -dice uno de ellos serio- pero el problema es que Carlos no nos ha pagado aún-.

- Solo he de recoger el paquete, el dinero no me incumbe a mi -le respondo tenso y serio-.

- Tan cagado como siempre -le dice al otro tío- Buenos vamos a hacer una cosa, quiero que le envíes un mensaje-.

- ¿Cual? -pregunto-.

- Qué traiga su culo aquí y que me pague primero -me suelta- ¿serás capaz de hacerlo?

Levanto la vista hasta mirarle a los ojos.

- No le tengo miedo -le respondo-.

- Bien, sino está muerto -le amenaza- tiene hasta la semana que viene para que venga-.

Después dan media vuelta y desaparecen de mi vista. Camino dos callejones abajo y me subo a la furgoneta donde me espera Alex.

- ¿Y bien? -me pregunta ansioso- ¿tienes el puto paquete?

- Hermano esto es más complicado de lo que pensaba -digo antes de que arranquen-.

Me llevan hasta el aeropuerto, una vez allí nos despedimos y le doy mil gracias por su ayuda. Camino hasta la puerta en embarque y me subo al avión.

Una hora después bajo de este, recojo la maleta y marco el número de Jesús. Un cuarto de ahora después aparece en el aeropuerto sudando y con nervioso.

- Nos tenemos que ir ya Daniel -dice cogiéndome del brazo-.

- Eh Jesús ¿qué coño pasa? -le pregunto preocupado-.

- Tienen a Elena -dice Jesús-.

________________________________
Continuará...😳

SOLO ÉL PODRÁ ACABAR CONMIGO. [Daniel Oviedo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora