Hablamos mis padres, Daniel y yo pero no sé hasta qué momento porque cuando despierto estoy en mi cama. Miro todo a mi alrededor y, parece que no, pero lo he echado de menos. Busco mi móvil pero no lo encuentro por ningún parte, así que supongo que lo perdí. Me levanto frotándome las muñecas doloridas.
Voy al baño, enciendo el agua, me desvisto y entro. Me relajo completamente al sentir el agua caliente recorrer todo mi cuerpo. Salgo con la toalla enrollada por el cuerpo, abro el armario y me pongo lo primero que pillo, unos pantalones anchos de chándal y una sudadera lila. Pongo la ropa sucia en el cubo y bajo las escaleras, allí me encuentro a mis padres, a Kate y a Kat. Cuando me ve me abraza fuerte.
- ¿Como estás? -me pregunta-.
Caminamos hasta la isla y me siento en el taburete.
- Por ahora bien -le respondo-.
- Buenos días -me saluda Kate, papá y mamá-.
- Hola -les digo-.
Mamá me prepara el desayuno, me lo como todo, friego el plato y la taza. Hace un día espectacular así que salimos las tres al jardín, en la mesa empezamos ha hablar de todo. Nos reímos muchísimo tanto que nos falta el aire en los pulmones. Horas después Kat se va a su casa para comer, Kate entra dentro y yo me quedo fuera con el sol en la cara.
La paz y tranquilidad que tanto esperaba por fin la tengo. Mamá me llama para que me siente en la mesa, allí comemos todos juntos. Cuando acabamos papá se va a su despacho para acabar algunos papeles, mamá limpia un poco la casa y yo subo a mi cuarto. Duermo un poco y cuando me levanto meriendo algo. Suena el timbre, camino pasando por el salón viendo a mamá y a Kate durmiendo, abro la puerta y mis ojos saltan de alegría al ver a Daniel.
- Hola nena -dice dándome un beso en los labios- ¿Cómo estás?-.
- Hola -digo como una tonta- Bien, pasa-.
Entra y cierro la puerta, caminamos hasta salir al jardín. Allí nos sentamos uno al lado del otro en la mesa.
- ¿Quieres algo de beber o de comer? -le pregunto-.
- No tranquila -me dice riéndose- soy yo quien te va a cuidar no al revés-.
Me rio al escuchar su comentario, nos besamos lentamente. Esos labios me matan y me reviven cada ves que se juntan con los míos. Una hora después mamá se levanta de su siesta.
- Hola mamá -digo cuando asoma su cabeza por la puerta- ¿has dormido bien? -.
- Hola chicos -nos dice ella- con Kate es casi imposible - ¿queréis algo? -.
- Si -digo levantándome con hambre-.
- Eh, yo he venido a ayudar a cuidarte así que siéntate -dice levantándose-.
Replico un poco al principio pero termino aceptando, cuando mamá y Daniel entran en la cocina en vez de sentarme en la silla me siento al borde de la piscina. Miro el agua de la piscina moverse y mi reflejo en él.
- Muy bonita -dice cuando refleja su cara al lado de la mía- Ten-.
Me entrega un bol con patatas y un vaso de Coca Cola, él se queda el suyo. Se sienta a mi lado y apoyo mi cabeza en su brazo. Nos quedamos en silencio, pero no es incómodo en realidad es agradable y maravilloso. Pero todo se acaba cuando agua cae en mi cara. Daniel empieza a reírse de mí y eso hace que me pique con él.
- Me las pagarás Oviedo -digo tirándole agua sin parar-.
Daniel contraataca tirándome a mi, pero él el doble que yo.
- Nunca podrás conmigo -me dice para picarme más-.
Nos pasamos tiempo y tiempo tirándonos agua hasta que acabamos los dos empapados.
- ME RINDO -chillo para que pare con el agua y de hacerme cosquillas- PARA PARA JAJAJA-.
Daniel sale de encima de mí y se estira en el césped.
- HE GANADO! -chilla levantando los brazos al aire-.
Este chico puede conmigo. Me rio sin parar, miro hacia la puerta y veo a papá apoyado en el marco, con una taza de café, de la puerta riéndose de nosotros. Me giro y me estiro a su lado mirando el cielo y como se pone el sol al atardecer.
- Muchas gracias por venir -le giro girando la cabeza para verlo- me ha venido bien jajaja-.
Segura haciendo que nuestras caras queden casi juntas.
- No has de dármelas -dice besándome la frente- estaré siempre a tu lado mi niña-.
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Continuará....☀️💦
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SOLO ÉL PODRÁ ACABAR CONMIGO. [Daniel Oviedo]
RomansaElena una chica con carácter, alocada y deportista se verá llena de cambios en su vida, de gente gilipollas, de lugares y sobre todo el amor. Daniel Oviedo cambiará su vida por completo, traerá violencia, dolor, cabreos y enfados, pero traerá amor...