Las palabras se las lleva el tiempo / Taeyong y tú

UN REENCUENTRO #60

Habían pasado días desde que le había dado el lápiz a Doyoung, pero el chico no había hecho nada. No sabía que hacer, me decía estar aterrorizado de traicionar a su amigo quien le había dicho que no se metiera más en sus asuntos personales. Sí, Taeyong había intercedido entre sus amigos para dejar a Suni de buena persona. Aunque él no sabía que Doyoung, Jaehyun y Haechan sabían la arpía que era. Pero con aquella prueba no era lo suficiente, necesitábamos algo concreto con el nombre de Taeyong en él.

Baekhyun me había enviado un mensaje hace un días, por lo que después de avisarle que estaba disponible conduje hasta su casa. Me encontraba subiendo el ascensor desde el subterráneo y al ir por el piso dos las puertas se abrieron, por intuición bajé mi jockey negro que traía sobre mi cabeza. Las puertas se cerraron y subí mi cabeza ya que la persona iba de espaldas delante mio. Vi a esa persona por el reflejo de las puertas de espejo dentro del ascensor, ese rostro no pasaba desapercibido. No lo había visto hacía tiempo por lo que me sorprendí al ver su nuevo estilo de cabello, más largo en la nuca y de color rubio ceniza, un peinado muy de moda llamado "Mullet". Algo me decía que su grupo estaba preparando comeback. Nadie me lo había mencionado, ni siquiera Doyoung.

          —Vienes seguido —dijo. Al solo oír su voz me tensé, no sabía si responder o quedarme en silencio— Pero no vienes a nuestra casa...

          —Ya no debería importarte lo que yo haga.

          —No me preocupa —en un pestañear estaba a mi lado— Sé que ves a Hyung, no soy idiota

          —De todas formas no lo estoy ocultando —levanté mi cabeza y di un paso hacia adelante, no quería sentirlo cerca, el olor de ese nuevo perfume lo odiaba. Pero su mano sujetando mi muñeca me detuvo— N-No me toques, no quiero hacer un escándalo

          —Solo quería decirte que está bien, no te preocupes más por mí —me soltó y me quedé en el lugar, quería oír la mentira que iba a decir— Sigue tu vida, quédate con él y olvídate de mí. Es lo mejor que puedes hacer. Hazlo y no mires hacia atrás sin importar qué

          —¿P-Por qué me dices eso? —pregunté enfadada mientas lo observaba— ¡No es como si deseara obtener tu permiso, no lo necesito!. ¡No me digas que hacer!

          —Lo sé —me miró y lo vi sonreír. Pero esa no era la sonrisa que veía antes en su rostro, no sé si fue mi imaginación pero lucía más delgado que nunca

Sin darme cuenta habíamos llegado al piso donde él vivía, lo vi salir del ascensor e irse sin mirar hacia atrás, al parecer él de verdad ya se había olvidado de mí. Odiaba ser así de inestable si se trataba de él, a pesar de que el tiempo había pasado aún no podía controlarme y lo fuera que llevara el nombre de Taeyong podía cambiar mi humor drásticamente.

          —Hola

Baekhyun me miró con una expresión que no pude descifrar, tal vez había notado algo extraño por mi manera de saludar. Me saludó de vuelta y abrió la puerta dejándome entrar. Me quedé mirando en la entrada hacia la sala de estar, vi que no se encontraba nadie y fue lo que me dejó un poco más relajada. Baekhyun pasó por mi lado y lo vi sentarse en el sofá, desde ahí me miró.

         —¿Pasó algo? —preguntó

Me tragué el nudo en la garganta, inhalé aire hasta llenar mis pulmones y exhalé sonoramente, miré a Baekhyun de pies a cabeza. Llevaba jean's de color azul, sujetados con una correa color café oscuro y llevaba una camiseta color blanca. Casual pero en él increíble, le quedaba como anillo al dedo. Me acerqué hacia él de frente sin quitarle la mirada, el chico se hecho hacia atrás en el sofá recostando su espalda en el respaldo. Así fue como me miró desde las piernas hasta mirarme a los ojos, fue lo que me hizo actuar sin pensar.

Me senté a horcajadas sobre sus piernas, así acercándome a él lo más posible y oliendo su perfume. Baekhyun no parecía sorprendido en lo absoluto y solo me miraba, así dejándome hacer lo que quisiera. Besé su cuello, pase mi lengua y lo saboreé, no sabía que estaba haciendo pero al parecer a él le gustaba y lo confirmé al oírlo respirar con dificultad. Sentí sus manos llegar a mis caderas y sujetarlas, fue cuando oí un pequeño gemido. Dejé un camino de besos desde su manzana de adán que era poco palpable hasta llegar a sus labios, los cuales me recibieron como la vez anterior y tomando el control. Con la diferencia que esta vez le dejé introducir su lengua y explorar, y demonios que exploraba bien. De a poco sentía sus manos avanzar hacia arriba bajo mi camiseta, llegando casi a mi brasier.

          —¿Qué pasó? —preguntó al alejarse bruscamente de mí.

          —A mí nada, tú te detuviste —dije respirando aceleradamente

          —¿Sabes como terminará esto, no?

Comencé a controlar mi respiración mientras miraba sus lindas clavículas, buscando un poco de estabilidad. El estúpido impulso que había tenido hace algunos segundos me había llevado a casi regalar mi primera vez a alguien a quién en realidad no amaba, no era a quien quería en mi primer recuerdo. Si bien a muchos no les importaba la primera vez al menos para mí sí era algo especial. Me quité de encima de las piernas de Baekhyun y me senté a su lado, me quedé mirando el piso mientras intentaba controlar mi respiración.

          —Lo siento si te estoy decepcionando pero... no sé, a mí en realidad no me importa pero intuyo que a ti sí. ¿Sabes? No quiero que luego cuando terminemos de hacerlo estés llorando en la cama... me haría sentir culpable

          —Lo entiendo y lo hago tan bien que te odio, no sé como lo sabes...

          —Eres muy obvia —rió— Hace un rato cuando llegaste, esa no era la chica que yo conocí...

          —Me odio, soy estúpida

          —Pienso que eres única, demasiado y eso es genial —lo miré y el me miró de vuelta— Pero hace unos días algo me dice que hacer las cosas por despecho no nos llevará a mucho...

          —¿No es lo que tú buscabas también?

          —Lo dije por despecho también, pues yo no tengo mucho que perder porque no he ganado nada aún... al contrario de ti que estás enamorada de alguien que estaba enamorado de ti también. Si haces algo que le duela entonces no podrás recuperarlo, jamás

          —¿Quién dijo que quería recuperarlo?, él ya no me ama de todas maneras

          —Él sabe que nos vemos, actúa como si no le importara pero yo no soy idiota. Solo al ver lo incómodo que se puso al verme en la empresa, lo hubieras visto. Me demostró que muere de celos. A él aún le importas y demasiado

          —Pues eso difiere un montón de lo que acaba de decirme. "¡No me importa, olvídate de mí!, ¡Sigue haciendo tu vida!". Diciéndolo como si tuviera poder sobre mí, le faltan cien tornillos. Es un idiota que la sigue cagando y no le importa, ya me reemplazó

          —Tú no entiendes nada, son códigos bonita. Está escrito por toda su cara

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Aquí un apartado para agradecer a todas las personas que siguen leyendo ♥

Prometo traer más capítulos seguidos