Tu mentira en Abril

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El bus avanzaba sin control.

Quedaron en salir a un centro comercial.

Todos estaban reunidos en el paradero, esperando a que llegara el bus que los llevaría a Megaplaza.

-Entonces... ¿quién falta? -preguntó Gerniel que había sido el último en llegar.

-Creo que solo, Mana y Noa, pero dudo que vengan -hizo notar Ervin-. En cuanto a Lex, no sabemos de él desde el campamento. Bry sigue sin asistir. Joar, Xander y Brig igual... No creo que nadie falte en realidad.

Gerniel miró a Ervin con una ligera sonrisa.

-Me refería a quienes faltan de los que habían confirmado.

-Oh, lo siento -dijo Ervin sonriendo tontamente-. Me dejé llevar. Entonces, no, estamos completos.

-Bien, ¡vamos! -anunció Baed levantando la mano para que un bus se detuviera.

- ¡No! -Ervin pareció alterarse- Contraté una movilidad para que nos lleve. Miren, ahí viene.

Un bus enorme de color azul se detuvo justo frente a ellos. Cuando subieron un señor de unos cuarenta y tantos años les dio la bienvenida. Todos subieron y se acomodaron. Mabel desde el asiento de atrás venía conversando con Aicerf y Nimzaj. Gerart y Katya iban en el asiento detrás de ellas, mientras que los demás estaban sentados de cualquier forma.

- ¿Has notado que estamos todos los afectados por la estrella fugaz? -le preguntó Faen a Gerniel.

-Sí -contestó Gerniel-, además de Katya y Ervin.

-Tengo un mal presentimiento, Gerniel.

El bus se detuvo. Estaban en Pro.

- ¿Llegamos? -preguntó Nimzaj a Mabel.

-No -contestó Ervin levantándose-. Recogeremos a unos cuantos amigos más.

La puerta se abrió con un deslizamiento sonoro. Aicerf no pudo evitar no sentirse feliz. Sueffer, Lex, Noa y Mana se encontraban ahora de pie buscando donde sentarse.

-Por aquí -Mabel levantó la mano y Mana se acercó a ellas-. ¿Cómo has estado? -le preguntó cuando se sentó.

-Yo bien. Mana, no lo sé.

- ¿De qué hablas? -Nimzaj no lo comprendía.

-Ya es momento de que se den cuenta de la diferencia entre ella y yo.

-Si no eres Mana -preguntó Aicerf-, ¿qué haces aquí?

El carro arrancó.

Noa se había sentado detrás de Gerniel y Faen.

Lex y Sueffer delante de Matt.

- ¿Cómo han estado, chicos?

-Yo bien -contestó secamente Lex, mirando por la ventana. El bus comenzó a ir más rápido.

-Yo igual -agregó Sueffer sin cambiar la expresión seria de su rostro.

Gerniel se giro para ver a su amigo.

- ¿Qué haces aquí? -le preguntó con una ira inexplicable.

- ¿Que qué hago aquí? Lo mismo que los demás.

-Tranquilízate, Gerniel -le instó Faen, tocando su hombro.

-No -Gerniel ignoró a Faen-. ¿Qué planeas? ¿Ahora trabajas con el Rector?

-La razón es sencilla -contestó Manatsu no Eve, mirando a Aicerf a los ojos-, quiero ver cómo es que superan lo que está por pasar.

Todos dejaron sus conversaciones de lado y miraron hacia donde Gerniel había levantado la voz.

Laztrasti: Academia | Libro 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora