Laztrasti: Academia | Libro 2

65. Profundidad

Gerniel Feat. Noa

Cuando todos estuvieron despiertos empezó la pelea.

Noa le reclamaba a Gerniel que las cosas habían acabado de esa manera por su culpa.

- ¿Qué hubiera pasado si no hubiese llegado Bryan a salvar a Wolf? ¿Te imaginas todo lo que habría sufrido su madre?

-Lo tenía todo calculado -le contestó Gerniel.

-Oh, claro. ¡Siempre está todo bajo tu control! Pues qué crees, Gerniel, nada de esto tuvo que haber pasado. ¡Pudimos evitar que experimentaran con Brig!

Gerniel guardó silencio.

-Noa... -susurró Aicerf.

- ¡Xander y Joar no hubiesen traído las puertas con sus poderes!

Gerniel guardó silencio.

Mabel trató de intervenir, pero Nimzaj le tomó la mano, evitándolo.

- ¡Yo no hubiese hecho ese estúpido juramento! ¡Y Ervin no hubiese sufrido lo que sufrió! Sabes qué, Gerniel, tu plan falló desde el principio. No querías que nadie resultara herido, pero ¿qué crees? Al final solo hiciste que todo empeorara.

- ¡Si tenías un mejor plan por qué no lo dijiste!

Noa se quedó callado.

El fuego se encendió.

Las manos de Gerniel estallaron en bolas de fuego negro. El agua blanca giró en torno a Noa.

Baed dio un paso para ponerse en medio de ambos, pero Faen lo jaló.

-No te entrometas. Creo que es mejor dejarlos.

Avanzaron, uno contra el otro.

Gerniel, era físicamente más fuerte que Noa, pero el segundo usaba su don para compensarlo. El agua, cortando la mejilla de Gerniel; el fuego quemando la espalda de Noa. Un puñetazo en la cara del otro. El vapor cuando los dones chocaban entre sí.

-Control de gravedad -dijo Noa.

Las columnas de agua rompieron el suelo. Dejando a la vista el abismo que había bajo Academia.

-Llamarada ígnea -exclamó Gerniel.

Las llamas saltaron a su alrededor.

El suelo se comenzó a partir y todos comenzaron a correr hacia las rejas de entrada, dejando al par de amigos atrás. Las puertas cayeron al vacío y a nadie le importó.

Wolf se quedó al final viendo como su primo peleaba con su mejor amigo. No pudo evitar sentirse mal.

Con una enorme explosión, ambos salieron volando hacia las rejas.

Empataron.

Wolf salió por completo de Academia y se paró frente a ella, con el resto.

-Estoy harto -dijo Noa, pateando a Gerniel.

Rodó varios metros, pero un segundo después se levantó. Un corte en su mejilla. Le brotaba sangre de la sien. Noa, por su parte, escupía sangre y sostenía su brazo izquierdo.

- ¿Harto de qué? ¿de siempre estar haciendo dramas? ¡Madura, Noa!

- ¡Al menos digo lo que siento y no me lo guardo y me alejo de las personas que digo que quiero proteger!

Por un instante, Wolf, sintió que también se lo decía a él.

- ¡Gerniel!

- ¡Noa!

-Ya basta -Faen apareció en medio de ambos-. Tenemos que irnos de aquí y arreglar todo.

- ¡Cierra la boca, Faen! -le gritó Noa- ¡Eres igual a él!

Ambos amigos miraron a Noa.

-Durante mucho tiempo siempre fui tras de ti, Gerniel -Noa dejó de sujetarse el brazo-, pero me cansé de ser tu sombra, y Faen, me cansé de fingir que no me importa cada cosa que dices para herirme. Aléjense de mí.

Su cuerpo comenzó a volverse agua y como serpientes se elevó hacia el cielo y se fue.