¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

La venganza del sol

42 (parte 3)

El Doctor comenzó a colocarse el traje ante la mirada de los dos humanos.

-No puedo permitirte que hagas esto.

-Estás gastando saliva, Scannell-habló Katherine con los brazos cruzados.-Cuando tiene algo en la cabeza no hay quien le pare. No vas a detenerle.

-Quiere abrir una esclusa en una nave que va hacia el sol. Nadie puede sobrevivir a eso. ¿Y le vas a dejar hacerlo?-preguntó a la chica.

-Si alguien es capaz de sobrevivir, es él. Y si se le ocurre morir, te aseguro que lo atormentare en la otra vida.

-Pero sigue siendo un suicidio abrir esa esclusa. A esta distancia del sol, los escudos apenas te protegerán.

-Si puedo activar el cierre magnético desde el exterior de la nave la cápsula se volverá a magnetizar. Mientras estoy fuera, tienes que abrir las puertas restantes. Necesitamos esos motores auxiliares-explicó con rapidez el Doctor con una voz seria.

-Doctor, escucha. Están muy lejos. Es demasiado tarde.

El Señor del Tiempo dejó de hacer lo que estaba haciendo, mirando a Scannell con intensidad.

-No vamos a perderla. Ahora te veo Katherine-dijo a la chica antes de colocarse el casco.

Scannell abrió la compuerta, dejándolo entrar en la sala continua. Luego se cerró la puerta tras él, Katherine se colocó frente a la ventana, viendo como la siguiente puerta, que daba al espacio exterior, se abría.

Descompresión iniciada

Impacto en 11 minutos y 15 segundos

Escudo térmico cayendo al 10%

El Doctor tuvo que apoyar la espalda en la pared, con mucho esfuerzo sacó su cuerpo fuera, intentando no caerse.

Afuera estaban los botones que tenía pulsar para que la cápsula regresara.

Apoyó un pie dentro, sacando el resto del cuerpo fuera para alcanzar los botones, sin lograrlo.

"¿Doctor, qué sucede?"

"No puedo, no puedo alcanzarlo. No sé cuando tiempo podré aguantar."

"¡Vamos, no te rindas ahora!" apoyó la castaña.

El Doctor pareció esforzarse más, logrando alcanzar su objetivo. La cápsula comenzó a regresar y el Doctor volvió dentro, pero antes de alejarse aún más, miró el sol.

-Está vivo-murmuró.

-¡Doctor, cierra la esclusa ya!-gritó Scannell.-Esa cápsula te aplastará.

Justo entonces apareció McDonell, entregandole un dispositivo.

-Quedaos aquí.

Impacto en 8 minutos y 57 segundos

Cuando la puerta se abrió, Katherine entró corriendo, acercándose al Doctor, que se estaba quitando el casco, lanzándolo al suelo.