¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

- Naturaleza humana -

Naturaleza humana (parte 1)

-¡Abajo!-gritó el Doctor entrando en la Tardis junto a Katherine y Martha, que lograron evitar un disparo directo.

Las puertas se cerraron, y el Doctor fue a levantar a la castaña.

-¿Te han visto?

-No lo sé.

-¡¿Pero te han visto?!-preguntó de nuevo preocupado, cogiendo sus brazos con fuerza.

-¡No lo sé!¡Estaba ocupada corriendo!

-Katherine, es importante, ¿vieron tu cara?

-Creo que no-terminó respondiendo.

-¿Y tu Martha?¿Te vieron?

-Creo que no.

-Bien. Vamos-se movió a la sala de consolas, despegando, pero notó la alarma de la pantalla que había allí.-Nos están siguiendo.

-Que importa, tenemos una máquina del tiempo-comentó Martha.

-Tecnología robada. Ellos tienen un manipulador del tiempo. Pueden seguirnos a donde vayamos. A través del universo. Nunca pararan-respondió tocando botones en la consola.

-¿Cómo pueden seguirnos?-preguntó Katherine.-¿Tienen alguna forma de ratrearnos?

El Doctor pareció detenerse, cogiéndose el pelo.

-A menos que...tendré que hacerlo. Katherine,-se giró para verla,-¿confías en mí?

-Claro que sí Doctor-respondió esta, la situación parecía muy seria teniendo en cuenta cómo estaba actuando el Doctor.

-¿Martha?

-Por supuesto-habló la pelinegra.

-Bien, porque todo depende de vosotras-dijo antes de coger algo de debajo de la consola.

-¿Qué cosa?¿Qué debemos hacer?-preguntó Katherine al notar que Martha no sabía muy bien que decir.

El Doctor mostró un reloj de bolsillo de color plateado con símbolos Gallifreyanos en ella.

-Toma este reloj, mi vida depende de él. Este reloj, Katherine, este reloj es-

X

John Smith se levantó en la cama de su dormitorio, recordando su sueño, aunque parecía demasiado real para su gusto.

Se incorporó con suavidad, girando su cabeza para ver a Katherine en camisón durmiendo junto a él.

Ella estaba a salvo. Su hermosa y brillante Katherine.

Con cuidado acarició su cabellos castaños, sonriendo al ver cómo salía lentamente del sueño.

-Hola-saludó.

-Hola-murmuró en un tono adormilado.

John se inclinó besando sus labios.

-¿Otro sueño?

-Sí-respondió.

Alguien tocó la puerta. John se levantó de su cama, saliendo de ella.