¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

- Familia de sangre -

Familia de sangre (parte 1)

-¡Decídete ya señor Smith!-gritó Jenny.

-Quizá si el corazón humano se rompe, el Señor del Tiempo aparecerá.

El Doctor miraba a Katherine con miedo en sus ojos. No podía perderla, ¡simplemente no podía!

Su vida había sido oscura hasta que la conoció. Recuerda cuando lo hizo, estaba lloviendo a cántaros, y ella corría por las calles desiertas de su ciudad, estaba empapada.

Él tenía paraguas, así que la ofreció compartirlo para que no se mojara más. Ella aceptó y la llevó hasta su casa, donde la secó y la dió una camisa suya para que no se resfriara.

Pasaron la tarde charlando tranquilamente hasta que sus ropas se secaron y dejó de llover. Se despidieron pero diciendo que se verían pronto.

Después de eso, John parecía estar siempre con ella. Su vida se llenó de color.

No podía perderla.

De repente se giraron, como si hubieran captado la esencia de un Señor del Tiempo. Katherine aprovechó su distracción para coger el arma del señor Clark, colocándose frente a él.

-Un sólo movimiento y disparo-amenazó.

-La amante está llena de fuego-comentó Baines.

-Tú cállate-dijo la castaña disparando al techo, causando más conmoción.

-Cuidado hijo mío. Todo esto es para que puedas vivir eternamente-recordó Jenny.

-Te mataré-levantó el arma Baines.

-¡No!-gritó John mirando toda la escena en completa tensión.

-Inténtalo. Moriremos juntos. ¿Quieres arriesgarte?

-¿De verdad apretarías el gatillo? Pareces demasiado asustada.

-Una muy buena amiga mía está siendo amenazada junto a mi novio. Lo que estoy es furiosa. ¿Quieres probar de lo que soy capaz?

Hubo unos segundos de tensión antes de que Jenny soltara a Martha y bajaran las armas.

-John, Martha, Joan, sacarlos a todos, hay una puerta a ese lado. Por ahí, ¡vamos!

-¿Y tú?-cuestionó John sin moverse del sitio.

-Os seguiré, te lo prometo, ahora vete de aquí-pidió.

Todos se fueron del salón de baile, quedándose solo la Familia y Katherine. Esta librero a Clark, aún apuntandoles con el arma.

-Debí haber tomado su forma-comentó Jenny, caminando hacia ella con lentitud junto a los otros.-Es mucho más divertida. Tiene mucho espíritu.

-¿Y Jenny?¿Ha desaparecido?-preguntó caminando hacia atrás.

-Está consumida, su cuerpo es mío.

-O sea que está muerta.

-Sí. Y se fue con muy poca dignidad. Todos esos gritos-contó.