¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

Resurrección fallida

El fin del tiempo - 1 (parte 2)

Fueron trasladados con el autobús de los ancianos hasta que Wilfred hizo que se detuvieran frente a una cafetería.

-¿Por qué es tan especial este lugar? Pasamos como 15 cafés por el camino-preguntó el Doctor.

-Sí. Buenas tardes-ignoró el anciano sin borrar su sonrisa.

Y ahora estaban sentados los tres en una mesa cerca del cristal donde se podía ver el exterior.

-Tuvimos buenos tiempos, ¿no? Toda esa cosa de los ATMOS. Y los planetas en el cielo. Y yo con la pistola de pintura-se rió haciendo parecer su mano una pistola.

Pero el Doctor estaba serio, con los brazos cruzados en el pecho. Katherine estaba con una postura más relajada, preocupada por este.

Al ver aquello, Wilfred dejó de sonreír.

-Sigo viendo cosas, Doctor, Katherine. Esa cara...a la noche-contó algo asustado.

-¿Quién eres?-quiso saber el Señor del Tiempo mirandolo sin fiarse de él.

-Soy Wilfred Mott-dijo extrañado de su pregunta, sobre todo el tono tan serio que usaba.

-No, las personas han esperado cientos de años para encontrarme a mi y a Katherine, tu lo lograste hacerlo en unas horas.

-Bueno, solo tengo suerte, supongo.

-No, nos seguimos encontrando Wilf. Una y otra vez. Como si algo nos siguiera conectando.

-¿Qué es tan importante de mi?-quiso saber el hombre.

-Exacto, ¿por qué tú?-desvió la mirada del hombre, luego se armó de valor y volvió a mirarlo.-Voy a morir.

-Bueno, yo también, algún día-dijo como si fuera algo normal Wilf.

-No te atrevas-habló Katherine al escuchar aquello.

-Bueno, intentaré no hacerlo-bromeó, pero se puso serio al ver el rostro desesperado del Señor del Tiempo.

-Me lo dijeron. "Tocará cuatro veces." Esa era la profecía. Tocará cuatro veces, y luego...-contó sin lograr mantener la neutralidad en su voz.

-Pero pensé cuando te vi antes, dijiste que tu gente podía cambiar todo el cuerpo-recordó el anciano.

-Igual puedo morir. Si me matan antes de la regeneración, estoy muerto. Incluso entonces, incluso si cambio, se siente como morir-contó en un tono de voz suave.-Todo lo que soy muere. Un nuevo hombre sale caminando...y estoy muerto-acabó temblando ligeramente.

Katherine agarró su mano, intentando aportar alguna clase de tranquilidad para él. Este se agarró con fuerza a su mano, no queriendo soltarla.

Wilfred los miró antes de mirar por la ventana.

-¿Qué?-preguntó la castaña antes de notar que Donna estaba fuera, con unas bolsas en sus brazos. Por suerte no los había visto.

-Lo siento. Pero tengo que hacerlo. Mira, ¿no podéis hacer que mejore?

-Detente-pidió el Doctor con fuerza.