- El cielo envenenado -

227 21 0
                                    

El cielo envenenado (parte 1)

-¡Se va a asfixiar Doctor!-gritó Donna.

El Señor del Tiempo estaba tumbado en el suelo debajo del coche, intentando detener el humo.

-¡No se abre!

Entonces apareció la madre de Donna con un hacha, se dirigió a la parte delantera y rompió el cristal. Todos se quedaron mirándola en shock.

-¡No os quedéis ahí parados!¡Sacarlo fuera!-les ordenó.

Ayudaron a Wilfred a salir del coche y llevarlo a la casa.

-No puedo creer que tengas un hacha-dijo Donna.

-¿Ladrones?-se excusó Sylvia.

-Entrar dentro, intentad cerrar ventanas y puertas-ordenó el Doctor.

-¡Doctor, Katherine!-llamó Ross conduciendo un coche negro antiguo.-Esto es todo lo que he podido encontrar que no tenga ATMOS.

-¿Vines Donna?-quiso saber la castaña a punto de entrar dentro.

-Sí.

-Donna, no vayas. Mira lo que pasa cada vez que ellos dos aparecen. Quédate con nosotros, por favor-suplicó su madre, pero fue detenida por Wilfred.

-Márchate cariño.

-¡Papá!-gritó Sylvia.

-No la escuches. Márchate con ellos. ¡Esa es mi chica!-alzó la voz cuando Donna corrió hacia el coche.

Ross arrancó el vehículo, llevándolos a la fábrica de nuevo en un tiempo récord.

-Ross, cuídate-dijo Katherine cuando salió del coche.

-Lo haré, no se preocupe. Galgo 40 a Trampa 1-llamó por el comunicador.-Acabo de volver con el Doctor y Katherine a la base, cambio.

-El aire es asqueroso-se quejó la pelirroja, siendo difícil respirar con tanto humo.

-No es tan malo para mí-dijo el Doctor antes de mirar a Donna.-Quédate dentro de la Tardis. Oh,-recordó metiendo la mano en su chaqueta, sacando una llave de la Tardis,-nunca te di la llave. Esto es tuyo. Es un gran momento, realmente-terminó con una sonrisa.

-Creo que no es el momento adecuado para esto-dijo Katherine tosiendo.-Quizás nos pongamos sentimentales después de que el mundo no se muera asfixiado.

-Buena idea-aceptó el Doctor dándole a Donna la llave.

-¿A dónde vas?-quiso saber la mujer.

-A detener una guerra-cogió la mano de Katherine y la arrastró con él.-Y tú vienes conmigo.

-¿Qué? Iba a ir con Donna-dijo esta volviendo a toser.

-Te necesito aquí-respondió entrando en el camión móvil de operaciones.

-Ya estamos aquí-habló el Doctor soltando la mano de su novia.-Cualquier cosa que haga, Coronel Mace, no se enfrente a los Sontarans en batalla-dijo en un tono de amenaza.-No hay nada que les guste más que la guerra.

-¿Y qué vas a hacer?

-Tengo la Tardis, voy a abordar su nave.

Katherine lo miró, extrañándose de que ese fuera su plan. Pero este se acercó a Martha, que estaba con su bata blanca de médico.

-Venga-llamó antes de salir corriendo fuera, con las dos humanas detrás de él.

El aire era cada vez más espeso, apenas permitiendo ver algo a unos cuantos metros de distancia. Por eso solo descubrieron que la Tardis se había ido cuando se acercaron lo suficiente donde la habían aparcado.

¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora