¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

Una estrella y el espacio

El fin del tiempo - 2 (parte 2)

Katherine y el Doctor se habían quedado solos en la sala de teletransporte. Este último estaba jugueteando con el cableado, intentando solucionar aquel desastre.

-¿Doctor?-lo llamó la chica algo insegura.

Al instante levantó la vista, notando que miraba hacia el espacio. Una especie de asteroide pequeño de color blanco estaba cayendo a la Tierra.

-¿Qué es eso?

-No lo sé-susurró el Doctor.-Pero espero que no sean malas noticias.

Katherine asintió volviendo con él, pero en vez de sentarse a su lado, se sentó detrás, abrazandolo por la cintura y apoyando su cabeza en la espalda del otro.

Como lo hacía el Señor del Tiempo cuando no se sentía bien.

-Doctor, estoy asustada.

-Ey, lo solucionaremos, como siempre hacemos-tranquilizó sonriendo.

-¿Y si esta vez no lo podemos hacer?¿Y si esta vez todo sale mal?

-Lo resolveremos-repitió.-Lo prometo.

Al final ella asintió, aún enterrando su rostro en su espalda mientras el Doctor seguía arreglando el cableado.

-Oh, ahí estáis-habló Wilfred acercándose a ellos.-¿Pudiste arreglar esta vieja máquina?

-Trato de arreglar la calefacción-respondió el Doctor mientras el anciano se sentaba junto a ellos.

-Sabéis, siempre había soñado con una vista como esta-reveló señalando la Tierra, soltando un grito emocionado.-Soy un astronauta. Es el amanecer sobre Inglaterra, mirad. Un nuevo día-dijo antes de decir con una voz más triste.-Mi esposa está enterrada allí. Tal vez no pueda volver a visitarla de nuevo. ¿Creeis que la cambio?¿En su tumba?

El Doctor lo miró con una expresión neutra, pero su voz revelaba las emociones que sentía.

-Lo siento.

-No es tu culpa, de ninguno de los dos.

Katherine asintió agradecida.

-1948, estaba allí-Wilfred señaló una parte del mundo.-Fin del mandato en Palestina. Soldado raso Mott. Era un idiota delgaducho, esperando en lo alto del tejado, en medio de la escaramuza...fue como una ventisca, todas esas balas en el aire. El mundo estaba loco.

El Doctor se quitó sus gafas, dejando a un lado lo que estaba haciendo y llamando así la atención del humano.

-Sí, no queréis escuchar cuentos de un hombre viejo, ¿verdad?-preguntó mientras el Doctor movía a Katherine para poder abrazarla de frente.

-Soy mayor que tú-declaró el Señor del Tiempo en un tono serio.

-Déjalo-dijo sin creérselo.

-Tengo 906 años.

Wilfred se giró, mirándolo con sorpresa.