¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

- Tyler, Smith y Jones -

Tyler, Smith y Jones (parte 1)

-Aquí, esa palanca es la adecuada-dijo el Doctor mostrando en su cabeza una imagen mental de la palanca.

Katherine y él estaban en la sala de consolas. El Señor del Tiempo la estaba enseñando a pilotar la Tardis, por lo que estaba detrás de ella con los brazos en su cintura.

Habían entrado en una relación mucho más íntima gracias a la Unión. Katherine se había acostumbrado a hablar telepáticamente con el Doctor. Lo malo era cuando se le escapaba por el enlace algún pensamiento, lo cual la hacía avergonzarse. Por suerte el Doctor la había enseñado a mantener barreras mentales para que no leyera los pensamientos que no quisiera.

Bajó la palanca y la Tardis se movió por el vórtice.

-Ahora el botón azul y luego tienes que regular el rotor-instruyó apoyando su cabeza en el hombro de la castaña.-Cuidado, casi nos vamos a los años 40. Y ahora...la misma palanca de despegue sirve para aterrizar.

Katherine volvió a bajar dicha palanca y la Tardis soltó un ruido avisando que había aterrizado.

-¡Brillante!-habló el Doctor besando con energía la mejilla de la castaña, haciendo que esta se riera. La Tardis también hizo un ruido como si estuviera orgullosa de la chica. El alienígena se acercó a la pantalla separándose de ella.-1 de abril de 2007, aterrizaje perfecto.

"Al igual que mi chica" añadió mentalmente.

Katherine se rió cruzando los brazos en el pecho.

"¿Estás coqueteando conmigo, Doctor?"

"¿Con quién sino?" preguntó con una sonrisa en su rostro. Pero cuando una alarma llamó su atención en la pantalla, la revisó con mucho cuidado.

-¿Qué pasa?-cuestionó acercándose a él.

-Hay ciertas anomalías en un hospital cerca de aquí. Deberíamos de ir a investigar-comentó girándose para mirar a Katherine.

-Así que, otra aventura.

El Doctor sonrió.

-Así es. ¡Allons-y!

X

El Doctor se hizo pasar por un enfermo con dolor de estómago para poder colarse en el hospital. Katherine se preocupó ya que el hombre tenía dos corazones, si lo descubrían lo detendrían o algo peor. Pero le dijo que no temiera, que no se darían cuenta de nada.

Así en ese momento estaban hablando tranquilamente, el Doctor en la cama que le habían asignado y Katherine al lado sentada en una silla.

-¿Ya has descubierto lo que está mal?-preguntó la castaña.

-Aún nada. Sé que algo pasa aquí, pero no puedo saber el qué-explicó.-¿Desde la Tardis has podido descubrir algo?

-Tampoco nada-suspiró Katherine.-Pero ha estado habiendo demasiada electricidad estática. ¿Es eso normal?

-Un calambre sí. Varias veces no, es extraño.

Se quedaron en silencio un rato, el Doctor después cogió su mano y la acarició con una sonrisa.

-Te he echado de menos-dijo haciendo que la otra se riera.

Cuando las horas de visita del otro día terminaron, volvió a la Tardis para cenar y dormir. Y como el Doctor apenas necesitaba dormir se aburrió demasiado.