¡Allons-y mi querida Katherine! (10° Doctor y Oc)

La Emperatriz de los Racnoss

La novia fugitiva (parte 3)

Corrieron dentro del edificio de H.C. Clements a toda prisa.

-Puede que para ti sólo fuera una cerrajería, pero H.C. Clements fue comprado hace 23 años por el Instituto Torchwood-explicó el Doctor corriendo por la oficina, hasta que encontró un ordenador que utilizar.

-¿Quiénes son ellos?-quiso saber Donna, que no había tenido tiempo de cambiarse de ropa.

-Ellos están detrás de la Batalla de Canary Wharf-contó la castaña, pero al ver que no le sonaba el nombre, siguió hablando.-La invasión de los cybermen-aún nada.-¿El cielo entero de Londres lleno de Daleks?-nada.-¿Tú vives en Londres?-cuestionó Katherine.

-Estaba en España.

La otra chica cambió la pregunta.

-¿Tú vives en el mundo?

-¿Por qué?-preguntó sin entender.

-Porque también había cybermen en España-explicó el Doctor.

-Buceo con escafandra.

-Gran panorámica y todavía sigues perdida-negó con la cabeza el Doctor corriendo a otro lugar de la oficina para mirar otro ordenador.-Torchwood fue destruido, pero H.C. Clements sigue el negocio. Creo que alguien llegó y tomó el control de la operación-dijo golpeando el ordenador algo frustrado.

-¿Pero que quieren ellos de mi?

El Doctor se separó para hablar con ella cara a cara.

-De alguna forma has sido impregnada con energía Huon. Y ese es el problema. Porque la energía Huon no existe desde los tiempos oscuros. El único sitio donde encontraría vestigios de una partícula Huon es en el corazón de la Tardis. Ya ves, esto es lo que pasa-cogió una taza que había allí para explicarlo mejor.-Es decir, esto es la Tardis,-cogió un bolígrafo,-y esto eres tú. Las partículas dentro de ti se activaron, se magnetizaron y "whap"-hizo un sonido metiendo el bolígrafo en la taza.-Te arrastraron dentro de la Tardis.

-O sea que la atrajo-pensó en algo Katherine.

-Soy un lápiz dentro de una taza-murmuró Donna.

-Sí, lo eres, 4H-habló dejando la taza en la mesa con voz tranquila.-Lance, ¿en qué estaba trabajando H.C. Clements? Alguna cosa secreta, operaciones especiales, prohibido entrar.

-No lo sé-dijo incapaz de pensar en algo mientras el Doctor entraba en los archivos del ordenador gracias a su destornillador sónico.-Soy jefe de personal, no me encargo de proyectos. ¿Por qué doy explicaciones?¿De qué demonios hablamos?

Katherine observó los archivos junto al Doctor.

-Tu haces claves-habló sin dejar de teclear.-Ese es el punto, y mira esto-mostró los planos del edificio.

-Estamos en el tercer piso-murmuró Katherine revisandolo con cuidado.-Debajo de recepción hay un sótano...

-Exacto-se levantó de golpe el Doctor, llamando al ascensor.-Entonces, ¿cómo es que hay un botón que marca más bajo del sótano?-entró al ascensor.-Hay una planta entera que no existe en los planos oficiales. ¿Qué hay abajo?

-¿Me estás diciendo que este edificio tiene una planta secreta?-quiso saber Lance incrédulo.

-No, te demuestro que este edificio tiene una planta secreta.