Katherine Tyler va a visitar a su tía Jackie por Navidad. Lo que no espera es encontrarse con una cabina azul y a su prima sacando a un hombre llamado el Doctor.
Tampoco espera que él sea su alma gemela, aunque no tenga ni idea de que eso realmente...
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Shada (parte 5)
Corrieron por los pasillos escondiéndose de los sirvientes de Skagra.
-Ingenioso lo de "jink". Los hice pensar que estaba tratando de llegar a la Tardis-dijo el Doctor.
-¿Qué estabas intentando hacer?-preguntó Chris.
-Llegar a la Tardis.
-Hay Dios-murmuró Katherine.-Y aún Skagra tiene a Romana.
-Doctor, ¿ese hombre debe estar loco, no?
-Oh, locura, cordura, es todo una cuestión de opinión.
-¿Y cuál es su opinión?-quiso saber la castaña.
-Está tan enojado como el sombrerero-revisó el pasillo antes de decirles algo.-Se han ido. Bien, de vuelta por donde llegamos silenciosamente.
Se detuvieron cuando escucharon un sonido familiar.
-Suena igual que la Tardis-comentó Katherine.
-Sí, eso es extraño-el Doctor se giró notando que uno de los sirvientes de Skagra los había encontrado.-¡Correr!
-¡Es un callejón sin salida!-habló preocupado Chris.
-Estamos atrapados-dijo Katherine.
El otro humano alzó la ceja al notar algo.
-Esto no estaba aquí antes-señaló a una puerta normal y corriente en la pared.
-¡Da igual!¡Entrar!-apresuró el Doctor a los dos humanos y a K9.
Entraron dentro cerrando la puerta, apoyando sus oídos en esta, solo se giraron cuando no escucharon nada.
Y al hacerlo se detuvieron de golpe.
Estaban dentro de la sala del profesor Chronotis, con una mujer de cabello castaño y gafas, junto...al profesor Chronotis.
-Sé que después de haber viajado durante tanto tiempo contigo, no debería sorprenderme. Pero estoy sorprendida-dijo Katherine sin apartar la vista de la escena.
-¿Chris?-cuestionó la mujer.
-¿Una taza de té?-preguntó Chronotis prestando atención a esta, que aún no había mirado a las personas que habían entrado.
X
-Doctor, ¿qué te parece mi Tardis?
-Oh, de primera. De primera-dijo él revisando el panel de control que había revelado frente a la mesa de estudio.
-Es estrictamente no oficial. Realmente no tengo permitido tener una.
-Sí, y que mejor manera de ocultarlo que viviendo en ella, viejo zorro astuto.
