No se como pasó, pero me enamoré de ella, y ahora por mi culpa se la han llevado...
Killua y Gon en una misión solo para cazadores, se encuentran con una enigmática chica.
Peligro, riesgos y romance los llevan a un país lejano, donde un curioso rum...
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Me quede allí, sin poder moverme ni un centímetro.
Su brillo era avasallador, me mantenía como en un momento congelado en el tiempo.
No podía dejar de mirar, su luz, su silueta, como todo resplandecía a su alrededor.
- La chica fantasma... - susurró Gon, ayudándome a salir de mi trance - es real...
Él también parecía medio hipnotizado.
Nos quedamos inmóviles, observando. No se cuanto tiempo transcurrió, ¿horas? ¿minutos? Pudo ser una eternidad y aun así no me habría dado cuenta.
Vimos como la chica se ubicaba justo debajo de la cascada. El agua golpeaba su espalda con energía, salpicando. Me pareció ver que, luego de unos momentos bajo la cascada, la chica brillaba aun más.
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Entonces, cuando ya me era difícil mantener la mirada fija en el resplandor, la chica dio unos cuantos pasos adelante. El agua le llegaba a la cadera.
Levantó las manos en el aire y bajandolas lentamente, apuntó ambas palmas hacia adelante. Un fuerte haz de luz salió de entre sus manos, y se estrelló contra una gran roca que se asomaba por la superficie del agua.
La roca tenía ahora una gigantesca grieta justo en medio.
Gon y yo nos miramos. Un escalofrío me recorrió la espalda. Tenía una fuerza descomunal.
Volví a mirar a la chica, que ahora brillaba con menor intensidad.
"Es su propia luz la que lanza hacia las rocas" pensé. "Y una vez que lo hace pierde un poco de energía".
- Eso... Eso es Nen... - susurró Gon.
- Eso parece - le respondí - ella no es ni angel ni fantasma... Es una usuaria de Nen.
- ¿Como obtendrá tanta fuerza? - me preguntó Gon - no creo que sea su propio Nen el que lanza.
- Quizás se recarga de algún modo, ¿has notado que el brillo aumenta cuando esta bajo la cascada, y disminuye cuando lo emite? - le comenté.
