64. Cambio en el viento

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Akira Pov.

- ¿Recuerdas la segunda noche que pasé en este barco? - me preguntó Gon- ___(t/n) se habia quedado dormida y yo estaba sentado solo en una esquina de la bodega. Me sentía inútil y sobrepasado. No habia podido mantener a ___(t/n) a salvo, y mi sacrificio no habia servido de nada. Ahora estábamos los dos aquí y yo le habia fallado a mi mejor amigo... Cuando estaba a punto de quebrarme, tu te acercaste a mi en silencio y aun sin saber completamente lo que habia ocurrido dijiste -

- No es tu culpa, Freecs... - por supuesto que lo recuerdo, no podía soportar verte tan desanimado...

- Fue como si hubieras leído mis pensamientos - me sonrió - Oírte decirlo me sacó de una especie de tinieblas que habían estado abrumándome... Luego te quedaste a mi lado en silencio, como para que no me sintiera solo. Creo que nunca te dije cuanto me ayudó sentir que estabas a mi lado a pesar de que no tenia porque importarte como me sentía; después de todo, ni siquiera nos conocíamos.

- Gon, exageras, es solo decencia humana básica... - me sonrojé.

- No sabes cuánto necesitaba oir esas palabras, Akira - se giró hacia mi y nuestras miradas se conectaron - Si no hubieras estado ahí yo... quizás jamás me habría perdonado a mí mismo...

Sostenerle la mirada me costaba, sentía que si continuaba mirándolo a los ojos se enteraría de mis sentimientos hacia él. Pero aun a pesar de eso no quería dejar de contemplar la intensidad de su mirada.

- Creo que ese fue el momento en que lo supe - dijo como para si mismo, aun que yo también lo oí.

- ¿Supiste que?

- Cuanto me gustas, Akira.

No le daba crédito a mis oídos... Sentí algo tibio crecer dentro de mi pecho.

- ¿Qué?

- Ya se que es repentino, y que tenemos poco de conocernos, yo... - de repente Gon parecía tan nervioso... Yo no podía contener la sonrisa - de verdad no es necesario que digas nada, yo solo quería que lo sup-

No lo dejé terminar. Apegué mis labios a los suyos para que entendiera perfectamente lo que sentía... Aun un tanto incrédula me separé de él para ver una tenue sonrisa en su expresión de sorpresa.

- ¿E-eso que significa? - preguntó aun medio confundido, como si junto con el beso también le hubiese robado la concentración.

Di un paso hacia él y poniéndome de puntitas volví a posar mis labios en los suyos por un breve momento. Mi corazón latía tan rápido que pensé que escaparía de mi pecho.

- ¿Ya entendiste? - le pregunté cuando nuestras miradas se encontraron. El me sonrió, abrazándome por la cintura.

- Creo que lo entenderé mejor si lo haces de nuevo - me pidió.

Cerré los ojos y me incliné hacia él una ves más, para un pequeño beso inocente. Pero el no dejó que me alejara y respondiendo mi beso con otro me dio a entender que al fin había comprendido lo que sentía por él.

- También me gustas - pude decir al fin. Él soltó una carcajada ligera.

___(PoV)

A la mañana siguiente no me fue fácil ocultar mi ansiedad. Ya no quedaba prácticamente nada para llegar a Isla Tormenta, y de la nada un fuerte viento golpeó de frente al barco, haciendo que redujera la velocidad de navegación. Desde el desayuno el cielo se habia vuelto gris, y algo me decía que se avecinaba una tempestad.

Aun que Killua intentaba disimularlo, era sencillo para mi notar que él también estaba algo ansioso, y tenia todo el derecho de estarlo. Nakamura nos habia explicado vagamente como era la isla y como funcionaban los poderes de Celeste, pero tener que confiar en su palabra para que nuestro plan funcionara lo tenia molesto y siempre pensando en miles de posibilidades y planes alternativos. Lo mismo ocurria con Kurapika.

- Tierra llamando a Killua - repetí por cuarta vez.

- ¿Ah? - me miró al fin - perdona estaba... en otra parte - fijó sus ojos en los míos y sonrió - ¿Te he dicho lo linda que te ves con el cabello trenzado?

Me agarró entre sus brazos haciendo que me sentara en la cama a su lado. Yo había ido a buscarlo para avisarle que el almuerzo estaba listo. Me reí y lo besé en la mejilla.

- ¿Te he dicho que te ves muy guapo cuando piensas? - le contesté. Él sonrió bajando la mirada - Te habia venido a buscar para que subiéramos a almorzar.

- ¿Quién necesita almuerzo cuando puedo devorarte a ti? - se inclinó sobre mi y yo me dejé caer sobre la cama. Sostuvo mi rostro con una de sus manos haciendo que se me erizara la piel.

Con cada beso me sentía más perdida en el tiempo y el espacio, comencé asentirme un poco mareada. Él se detuvo y sentí como contenía una sonrisa.

- Otra vez olvidaste respirar - me dijo. Tenia razón... Me sonrojé recuperando el aliento.

Killua se recostó a mi lado y tomó mi mano entre las suyas, observándola como quien contempla una frágil figura de cristal.

De repente sentimos como el barco se sacudía y se tambaleaba bruscamente. Escuchamos un trueno.

A penas podía mantenerme en pie y Killua me sostuvo para llegar a la puerta de la habitación. Al abrirla vimos como por la escalera se colaban litros y litros de agua al interior de barco.

- Killua, ven a ayudarme a recoger las velas! - escuché que Leorio lo llamaba.

- Ve, yo estaré bien - le dijé antes de que pudiera negarse.

- Pero -

- Killua, date prisa! - exclamó Leorio.

- Vete ya!

Él solo asistió y subió corriendo por la escalera. Aun me impresionaba lo rápido que era.

Caminé aferrándome a lo que pude en el pasillo con el agua llegándome a los tobillos. Esto era malo, la tempestad que había presentido había llegado mucho antes de lo que yo esperaba...

Vi como Akira salia de la bodega de la comida y se acercaba a la escalera, aferrándose de la baranda.

- Estas bien? - me preguntó con un grito. Otra gran descarga de agua calló por la escalera, empapándola.

- Akira! - avancé hasta ella, preocupada, pero ella me sonrió manteniéndose en pie

- No es nada, voy a subir a ayudar a Gon - me dijo - tu quédate aquí, ¡es peligroso allá arriba!

- ¿No es peligroso para ti también? - me aferré a uno de los pilares para evitar caerme con el vaivén violento del barco.

- Solo subiré a decirles que se amarren a algo o saldrán despedidos por la borda! - me explicó

- Akira espera! - al fin llegué a la escalera y la sujeté de la muñeca - Kurapika, Leorio y Gon ya han sobrevivido a una tempestad como esta, justo antes de dar la prueba de cazador... - le dije con dificultad.

Otro trueno se escuchó y el barco se sacudió. Yo estaba aterrada...

De repente escuché un grito de ayuda venir desde abajo. El agua seguía entrando por la escalera y me golpeó en la espalda. Me recordó al agua de la cascada donde solia entrenar. Sin darme cuenta, comencé a brillar.

- Tu escuchaste eso? - me preguntó mi amiga. Otro grito, justo bajo nosotras.

- Son Celeste y Nakamura! - le respondí.

- Es cierto! - Akira abrió los ojos muy grandes - la bodega de los prisioneros debe estarse inundando!

Sin darme cuenta de lo que hacia mi cuerpo, me solté de la escalera y me aferré como pude de uno de los pilares, avanzando hacia la puertrampa.

- ___(t/n)!! - Akira me siguió con dificultad - a donde vas?

- Tenemos que sacarlos de ahí - le dije - o se ahogaran.

El Rescate (Killua Y Tu) HxH Fanfic Donde viven las historias. Descúbrelo ahora