La batalla contra Cronos I

495 30 2
                                    

Percy miraba a Cronos, obviamente estaba enfadado. Su rival tenía un poder bastante problemático. Podía volver su cuerpo atrás cuando tenía una herida, tal y como lo había hecho cuando el hijo de Quíone le clavó numerosas estacas de hielo en su cuerpo. No podía permitirse fallar, sus compañeros estaban en peligro.

Percy llegó a la conclusión de que no podía dar el tiempo justo para que pueda curarse con el tiempo. Sin dar tiempo a Cronos para que haga algo con su guadaña volvió a crear estacas de hielo que volvió a proyectar al titán, pero este lograba destruir las estacas que este había creado, pero no vio venir unas estalagmitas de hielo que salían del suelo que atravesaron las piernas de Cronos aprisionándolo temporalmente cosa que aprovechó Percy para darle un puñetazo en el rostro rompiendo la nariz. Sabía que no tardaría en resetear su cuerpo, por lo que tenía que hacer un nuevo ataque. Se equilibró en el suelo una vez solo para dar una patada en el rostro tirándolo al suelo para que hiciera un charco de icor dorado en el suelo al salir del hielo que lo había apresado.

En ese momento Percy dio un salto hacia atrás con la intención de poner distancia entre ellos dos. Poco después de eso Cronos se levantó sin ninguna herida en su cuerpo por haberse sanado. - Te veo un poco desesperado. - Dijo Cronos con una sonrisa que mostraba toda su dentadura. - Eres bueno en el dominio del hielo y la temperatura ambiente, tanto que este cuerpo esta sufriendo la consecuencias del frío. - Dijo este con lo que parecía ser alegría. - Me encanta esto, me recuerdas a tu padre y tíos.

- No me compares con ese ser. - Dijo enfadado. - Él y yo no tenemos nada en común. - Dijo solo para hacer un ráfaga de viento helado golpeó el cuerpo de Cronos haciendo que algunas partes de su cuerpo enrojecieran por la poca temperatura que estaban soportando, si Percy pudiera exponer más tiempo su piel al frío no podría usar esas partes. Pero tampoco podría usar esa opción ya que volverá a resetear su cuerpo. Tenía que acabar con Cronos y para eso tenía que cortar su cabeza, pero no será fácil. 

Obviamente, Cronos le es indiferente que hieran su cuerpo, pero protegerá la cabeza ya que la mente es necesaria para que el cuerpo funcionara. Cronos parecía una cucaracha, pero no compartía esa capacidad de poder sobrevivir sin su cabeza.

Como cualquier ser vivo, ya sea un ser mitológico o normal, tiene una energía limitada. Percy estaba completamente seguro de que si agotaba su energía Cronos será una presa fácil, pero él también tiene que aguantar y reservar su propia energía para ganar.

Mientras nuestro héroe estaba pensando Cronos llegó hasta él con su guadaña en alto con la intención de degollar al semidiós helado. Percy logró evadir a tiempo el ataque de la guadaña rodando por el suelo haciendo que la hoja curva del arma se clavase en el suelo congelado. La guadaña estaba bien clavada en el suelo, haría falta mucha fuerza para que pudiera sacarla, pero el titán del tiempo logró sacarla como si nada demostrando que no solo tenía excepcionales poderes mágicos si no que también tenía fuerza física.

Percy se alejó para mantener distancia entre ellos. Los dos se miraron un tiempo intentando buscar posibles puntos débiles y aperturas. Unos segundos después Cronos arremetió contra el semidiós con su arma en alto. Cronos había desprotegido su torso, por lo que Percy corrió a por él con dos espadas de hielo en sus manos preparadas para cortar a su enemigo. Las armas chocaron con un ruido sordo y causando una honda de viento por el choque. Desde ese primer golpe las armas comenzaron a colisionar una y otra vez, parecía una escena sacada de una película de acción, pero el intercambio de golpes cesó cuando un lanza de hielo atravesó su abdomen, justo en la parte donde el estómago está establecido.

Con un gemido de dolor Cronos retrocedió solo para ser atacado nuevamente en su torso causando que más icor saliese por los cortes que le había hecho. Cuando terminó de atacar había más de quince cortes en el pecho. El hielo del suelo estaba manchado de icor dorado. Pero eso duró poco ya que el torso del titán volvió a curarse cosa que molestó mucho a Percy.

Poco a poco Cronos comenzó a retroceder con una sonrisa. De un segundo a otro comenzó a correr por el bosque. - Con que quiere jugar. - Dijo Percy molesto. - Ahora este bosque es mi territorio, se exactamente donde estás en cada segundo, más te vale comenzar a correr lo más rápido que puedas, porque te voy a cazar como a un conejo.

Percy salió disparado de su posición con mucha facilidad haciendo que comenzara la búsqueda de su enemigo. Él sabía que Cronos estaba corriendo a unos cincuenta metros por delante de él mientras corría en una dirección hacia el sur. Corrió con mucha velocidad con la intención de partir a Cronos por la mitad con sus armas de hielo dentro de poco podría alcanzarlo. Pero cambió de rumbó a unos pocos metros antes de que la hoja de Percy fue a por su cuerpo. Hizo un giro hacia el Este, por lo que Percy se vio obligado a correr en paralelo para intentar alcanzar a Cronos. Él se situaba a quince metros de distancia a la derecha del héroe.

Queriendo acabar con la pelea Percy comenzó a bombardearlo con estacas de hielo que dirigía a la cabeza que estaba protegida por la guadaña. Percy se enfadó por lo que estaba pasando por lo que comenzó a bajar más la temperatura llegando a temperaturas bajo cero haciendo que inconscientemente Cronos se vea obligado a descender la velocidad con la que corría.

- Ya vasta Cronos. - Dijo Percy una vez que se puso delante del titan. - Dentro de poco ya no podrás caminar por el frío. Tus músculos dentro de poco empezaran a tensarse con la intención de mantener el poco calor corporal que queda en tu cuerpo.

- Es una buena estrategia. - Dijo Cronos con una sonrisa. - Me gustaría seguir en este plano temporal para poder jugar con la vida de tus amigos, pero bueno. Si me veo obligado tendré que jugar a mi favor. - De repente todo al rededor de Percy y Cronos se detuvo. Algunos pájaros se quedaron quietos en el aire en pleno vuelo, algunas ardillas se quedaron quietas en pleno salto para buscar un refugio del frío. De repente las condiciones adversas ya no importaban, ya no hacía frío y el tiempo no pasaba. El tiempo se había detenido y estaban jugando en el terreno de Cronos. - Como Puedes ver, ahora tu truco de hacerme pasar frío ya no servirá.

Ahora Percy no podía usar el frío a su favor. - Eso no me parará. - Dijo el semidiós con una mirada carente de sentimientos por el titán. - Terminaré matándote sin importar lo que hagas.

Antes esa declaración hizo que Cronos se riera por la seriedad de Percy. Pasaron unos segundos hasta que Cronos de la nada apareció al lado del semidiós con su guadaña en alto lista para cortar la cabeza de Percy, pero este paró en seco la hoja de la guadaña con un bloque de hielo que creció desde su espalda. Sin ni si quiera mirarlo hizo que creciera el hielo de su espalda como un montón de cristales que que salían de la tierra por debajo de la corteza terrestre. Cronos se vio obligado a retroceder por la formación del hielo en la espalda de su oponente.

Sin dar un solo segundo de descanso Percy saltó a donde estaba él con unas garras de hielo formadas en sus manos, como una bestia sedienta de sangre que quería sangre. Esa mirada hizo que Cronos pasara a la defensiva, efectivamente no se parecía en nada a su padre, era más como esa diosa invernal del rey del viento del norte. Una sonrisa adornó la cara del titán al ver su tremendo parecido con Quíone.

Los zarpazos de Percy fueron contrarrestados por la guadaña y viceversa. Cada vez que las garras eran dañadas eran reparadas automáticamente por los poderes de Percy. Pasaron los minutos en la pelea, ninguno de los dos habían conseguido dañar al otro. De eso Percy sacó la conclusión de que Cronos se protegía, lo más seguro era que si estaba en este plano temporal detenido no podía resetear su cuerpo, por lo que podía herir su cuerpo y él no podrá curarse.

Tenía que comprobar esa teoría, por lo que tenía que ir con todo para esta nueva misión que tenía que cumplir esa pequeña misión. Percy sin perder tiempo comenzó a crear una gran cantidad de estacas de hielo que lanzó en contra de Cronos, este hizo lo que pudo para poder destrozar todas la estacas, pero este no se dio cuenta de que Percy se había acercado junto a una nueva oleada de estacas fluían por el aire con la intención de dar a Cronos. El titán había podido destruir las estacas, pero Percy se había aproximado lo suficiente como para hacer una pequeña heria en el costado, como si le hubieran operado de apendicitis hace tiempo. El titán había conseguido saltar hacia atrás, pero no se había dado cuenta de que tenía una herida. El icor cayó de su cintura llamando la atención de Cronos, pero no lo curó. Su hipótesis es correcta, en este lugar no Cronos no podía curarse a sí mismo.

Ahora comenzaba la pelea de verdad.

Percy Jackson el señor del inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora