El secreto de los Potter

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Nymphadora, como el profesor Moody la había llamado era una metamorfomaga. Por lo tanto el cambio de color en su cabellera expresaba sus sentimientos, una vez que le llames por su principal nombre está enrojecerá, me había limitado a llamarla tonks. La cual se había unido una vez saliendo de Hogwarts al ministerio de magia, y se entrenó para convertirse en una aurora bajo la atenta mirada de Alastor Moody. Tonks se había unido a la segunda orden del fénix, trabajando de manera encubierta en el ministerio y ayudando a proteger al departamento de Misterios.

—Así que Sirius es tu tío.—susurro una vez que llegamos a una privada, la cual inesperadamente se había abierto dando entrada a una puerta más.

—Así es, mi madre es una black—contesto tomando de mi mano para adentrarnos.—Hemos llegado a Grimmauld Place, Justo aquí es La casa black.

Observó lo grande que está era, y el pequeño corredor en el cual observó los cuadros que se encontraban en la pared. El profesor Moody se adentró resonando su bastón, siendo seguido por los demás hechiceros, al final tonks nos guiñó un ojo para seguir su camino; en el cual se había tropezado un poco. A lo lejos en la misma habitación que ellos habían entrado, la silueta de un hombre sobresalió, aquel hombre que años atrás había reconocido, Sirius black. Harry lo noto de igual manera mientras se acercaba, no se encontraba solo el señor weasley estaba presente, junto a remus que nos observó sin ninguna expresión. Todos parecieron guardar silencio una vez que nos observaron, Molly había llegado hacia nosotros cerrando las puertas consigo.

—Harry.—exclamó—Jane

—Señora Weasley—musitamos al uniso.
—Que bueno que están bien—expresó acercándose a nosotros para abrazarnos con ternura, el olor a comida llegó a mis fosas nasales sabía perfectamente que Molly era una cocinera con demasiada experiencia.

—¿Están hambrientos?—preguntó acariciando la cabellera de harry que hace un par de días había cortado—Temo que tendrán que esperar a que termine la reunión

—Si. Sobre eso..—intento preguntar harry, pero Molly lo paro de pronto.

—No ahí tiempo para explicar. Suban las escaleras, la tercera puerta a la izquierda—musitó finalmente observando a harry marcharse pero antes de que Jane siguiera el camino mencionado la paro de pronto—Jane,¿todo bien?

Molly me había mandado un par de cartas en el verano, de las cuales solo había contestado una asegurándole que me encontraba bien y que no debía molestarse al mandarme cartas sabiendo que debía estar ocupada pero aquello no fue un impedimento, sabía que se preocupaba por ella. Agregándole al hecho que se había enterado por la ruptura con su hijo.

—Estoy bien. Ha sido difícil, pero me encuentro bien—respondo amablemente

—De acuerdo. Puedes ir a la habitación donde se encuentra ginny, estarás más tranquila. A la segunda puerta a la izquierda, cariño.—terminó de decir

El camino hacia la habitación no había sido del todo difícil sin embargo la presencia de un elfo doméstico que parecía estar conversando con un cuadro había llamado mi atención. Harry al parecer había entrado ya a una habitación la voz de Hermione junto a la de ron se había escuchado en el pasillo, me acercó a la puerta una vez que la abro observando el interior. Tres literas de las cuales se encontraban en buen estado con sábanas completamente obscuras.

—Jane—exclamó sonriente ginny una vez que llegó hacia mi

—Ginny. Has crecido bastante, pero mira tu cabellera—sentenció emocionada acariciando su larga cabellera rojiza cabreado.