El secreto de los Potter

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La mañana siguiente había transcurrido con normalidad para Jane, después de la advertencia que había dejado para Seamus inclusive para alguno que dudara de la palabra de harry o quisiera meterse con el, jane no mentía al hecho que haría cualquier cosa por su hermano. Se le daban muy bien los hechizos y atacar, no dudaría en tomar ventaja y usar sus habilidades para proteger a su hermano. Las chicas se encargaron de defender a harry de algunos comentarios que recibía el chico, inclusive los gemelos parecían bastante molestos ante el comportamiento de todos en gryffindor.

—Lo juro, creí que ella le lanzaría un hechizo.—explicó con emoción lee

—Su rostro, Jane estaba hecha una furia—explicó fred ante la escena de jane la noche anterior

—Ni me lo digan a mi. No puedo si quiera superar que mi novia tenga demasiadas agallas, maldicion.—

La mayoría del instituto sabría del escándalo que la mayor de los potter había ofrecido la noche anterior, los cuales se limitaban a expresar que seguramente ella era aún peor que harry, agregándole la muerte de cedric. "Ella seguro debe mentir. Solo mírala, es una potter" "¿Acaso le importo la muerte de cedric? La he visto besarse con George, su vida es tan normal. Tal y como harry. Ellos están alegres de su muerte" "Sufre problemas mentales, es de familia".

Que se jodan

Alicia trató de que nadie usara mi nombre para levantar falsas acusaciones pero al parecer los estudiantes se empeñaban en hacerlo, pero este año no pensaría dejar que alguno si quiera me afectara. Katie, me acompañaba a todos lados tal y como angelina, las cuales observaban a todos esperando para defenderme. Pero no había sido necesario, al final todos son ruidosos cuando uno no está presente, sin embargo cuando lo está se limitan a estar en silencio.

—¡Maldicion, harry! Mira tú mano—tomó con cuidado la mano de harry la cual se encontraba roja y con restos de sangre—Esa mujer acabara con tu mano

—No ha sido nada..
—¿No ha sido nada?—golpeó su cabeza con mi mano—Mirala, luce horrenda ¡Por dios! Deja de llevarle la contraria, sólo te castigas a ti mismo
—No dejare que oculte la verdad.—musitó finalmente

—Harry esa mujer es una horrible bruja, tal vez seria buena idea hablar con Dumbledore—sugiero pero la risa sarcástica de harry me interrumpió
—Dumbledore está lo suficientemente ocupado para atender de mis problemas ahora.—musitó levantándose del pequeño banco de la biblioteca—Estoy bien, jane.

—Ella te está torturando.. hablare con ella, iré a contárselo a McGonagall—musitó levantando la voz, pero harry había llegado hacia la salida sin voltear a verme una sola vez más.

Los días transcurrieron con normalidad sin embargo, los castigos de harry se repetían día tras día, hermione me había hecho saber del comportamiento que había estado demostrado harry con ellos y algunos alumnos, por lo tanto creyó conveniente que necesitaría hacerle saber todo lo sucedido a McGonagall; las dos creímos que sería la mejor opción para ello, siendo la nueva prefecta este año, lo mejor sería recurrir a mi superior.

—Entonces has hablado con McGonagall—confesó george tomando de mis cosas mientras caminábamos por el pasillo

—Lo he hecho, no dejaré que esa mujer vuelva a torturar a mi hermano.—sentenció molesta

—Mi madre si se llega a enterar no dudaría en hacerle una visita a la bruja de Umbridge—musitó divertido

La silueta de fred corriendo junto a lee llegaron hacia nosotros tomando de nuestros brazos acercándonos a las afueras del gran comedor, no fue necesario preguntar qué era lo que estaba ocurriendo cuando las siluetas de la profesora McGonagall junto a Umbridge parecían estar discutiendo. Observó a Hermione la cual me mira con preocupación; las dos habíamos hablado con la profesora McGonagall advirtiéndole las torturas que había estado regalándole a harry.