83. Duele

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Sábado 14:26 (Cris)

Desde que se ha ido, no he parado de llorar ni en mis sueños.

Aunque, en realidad, no sé si he dormido de verdad.

Cuando esa puerta se cerró, sentí que me había quedado sin fuerzas.

No la amo pero, la quiero demasiado y, esto duele como la puta mierda.

No he cenado, no he desayunado, tampoco voy a comer ahora y solo he salido de mi cama para ir al baño.

Me duele la cabeza como si tuviera resaca acumulada de una semana entera.

Cada vez que mis lágrimas dejan de caer, creo que estaré bien, pero, luego veo alguna foto en mi móvil, o a Clowni recostado a mi lado, o a su guitarra, o a la sudadera que llevo puesta.

Hoy sí la echo de menos y creo que no saldré de la cama en unos días.

Sábado 19:53 (Joana)

Joana: Yo también te extraño -digo a la pantalla de mi teléfono, sin mentir-.

Martina: Encima, todavía no sé cuando voy a volver...siento que ya llevamos un año separadas, no me gusta dormir sola -la veo poner cara triste y hacer puchero con sus labios, lo que me hace reír bajito-.

Joana: Te diría que tampoco me gusta dormir sola pero, Maia duerme conmigo hace días -y sonrío pero recuerdo a Cris-.

Martina: Me pondría celosa si no supiera que es tu hermanita.

Joana: ¡Boluda! -me río pero por dentro me come la culpa- Bueno...me tengo que ir. Tengo la cena que te dije y todavía ni me duche.

Martina: ¡Noooooo! No te vayas, amor.

Joana: Es que, no puede faltar la protagonista, amor. Si no lo fuera, te juro que me quedaría hablando con vos toda la noche...

Martina: Mmm...está bien -su voz parece la de bebé- ¿Hablamos mañana? -sonrío y asiento- Bueno, que la pases lindo, te quiero mucho y a ver si me mandas foto con el outfit.

Joana: Si, dale. Yo también te quiero. Si no vuelvo tarde, quizá puedo volver a llamarte y si no, que duermas lindo hermosa.

Martina: Voy a soñar con vos -me guiña un ojo y tira un beso a la cámara- Chau.

Joana: Chau -sonrío y termino la llamada-.

Una vez estoy lista, le envío algunas fotos y me dirijo al lugar de la cena. Creo que es un bar pero nunca he ido.

Sábado 21:17 (Joana)

Juan: -es el productor más joven del equipo- Bueno ¿Vamos a pedir ya? Si sigo tomando cerveza sin comer, me voy a sentir mal eh y no vais a querer aguantarme así.

Nora: Es que no ha llegado Cris -y es verdad, es algo que he notado hace tiempo, y me preocupa-.

Inés: Le he preguntado pero no me ha respondido.

Jorge: A lo mejor quería pasar la noche con su novia -siento que algo en mi pecho comienza a soltar fuego-.

Inés: Pues mira, no -observa su móvil- dice que no se ha sentido bien desde anoche, que no ha salido ni de la cama.

Amira: ¿Que raro no? Ayer estaba bien.

Jorge: Fijo que está con la novia.

Inés: Dice que quizá ha sido algo que ha comido pero que no os preocupéis que sólo necesita descansar y en casa está tranquila, y no, dice que está sola.

He escuchado la conversación atentamente y, hay algo que no me cuadra.

Cris nunca fue una persona de sentirse mal por la comida y la noche anterior estaría con Malena, y estoy segura de que si se sintiese mal no la dejaría sola.

Me comienzo a preocupar y quiero irme del lugar en ese preciso instante pero no puedo hacerlo así, de repente, siendo tan obvia.

Creo que es hora de jugar mi ficha favorita; mi hermana.

Tomo mi teléfono y pongo una alarma para dentro de unos 2 minutos. Lo guardo en mi campera y espero a que suene.

Una vez suena, empiezo con el drama.

Joana: Hola -hablo con mi móvil pegado a mi oído- ¿Que paso ma? -doy unos segundos simulando que ella me habla- Pero ¿Está bien? ¿Segura? ¿Querés que vaya? No, puedo ir. Que sí, puedo ir. En nada estoy ahí. Chau. -miro a mi costado-.

Inés: ¿Que ha pasado?

Joana: Mi hermana.

Inés: ¿Está bien?

Joana: Sí pero, me tengo que ir.

Inés: Pero ¿Qué le pasó?

Joana: Luego te cuento bien -ella asiente y yo me levanto de la silla para decirles a todos que me disculpen que me tengo que ir-.

Salgo del bar y camino en dirección a casa de Cris.

Sé que quizá no debería estar haciendo esto y, que quizá, cuando llego, Jorge tenía razón y está con su novia pero, quiero ir. Quiero asegurarme de que está bien.

Llego a su puerta y se me complica tocar el timbre porque en una mano llevo una caja de pizza y, en la otra, unas 6 latas de cervezas.

Quizá si se siente mal y no puedo comer ni beber pero, espero que no.

Cuando puedo tocarlo, espero por al menos un minuto y nada. Lo toco varias veces pero no hay resultado.

Decido tocarla por última vez y cuando la puerta no se abre, doy media vuelta, alejándome da ahí.

Ya he pasado 2 puertas desde la de Cris y llego al ascensor donde pulso el botón y espero pero, no por mucho tiempo.

-: ¿Joana? -escucho a lo lejos, no es un grito, ni parece ser dicho con mucho ánimo pero reconozco su voz y puedo notar que, definitivamente, no está bien. Me doy vuelta y, sin dudarlo, me acerco hacia su puerta. A un metro de ella, apoyo las cervezas en el piso y la abrazo. Sé que lo necesita-.

**Nuevo capítulo, nos estamos poniendo las pilas para poder actualizar mas seguido pero con esto del cambio de hora en españa no es tan facil. saludos a tods, esperamos esten bien :)**

Si es contigo, mejor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora