Si es contigo, mejor.

86. Yo también

Domingo 12: 47 (Cris)

Cris: -la primera pregunta me sorprendió pero la segunda me dejó en K.O porque realmente no quería responderla. Me quedé en silencio, dejando que el tiempo pasara porque no quería mentirla pero, tampoco quería decir la verdad- En realidad...-y su móvil me hace el favor de sonar-.

Joana: Hola -deja de mirarme- hola, amor -ah genial, lo que me faltaba- No, no hacía nada importante- Ah pues, ahora, no soy importante. La escucho hablar pero no sé qué dice. Estoy pendiente a mis pensamientos. Si esa llamada no hubiese existido, si ese móvil no hubiera sonado, si eso no hubiera pasado podría estar diciendo cosas de las que me arrepentiría al segundo de verla con ella otra vez- Si, hablamos a la noche -esa frase me trae a la realidad. No importa cuánto tiempo pasemos juntas, no importa cuantas veces la haga reír, no importa cuantas veces sienta que tontea conmigo, no importa nada de eso porque siempre regresará con ella- Chau, yo también. -ojalá me hubiera respondido lo mismo, a mi, la noche anterior- Perdón -me mira- Entonces...mmm Malena.

Cris: Sí, quiero estar con ella.

Joana: Entonces ¿Estás segura de que estas enamorada de ella? -pero por qué me pregunta estas cosas-.

Cris: ¿Por qué me preguntas eso?

Joana: A lo mejor quieres estar con alguien más y por es lo han dejado.

Cris: Quiero estar con ella.

Joana: Val -no la dejó terminar-.

Cris: ¿Y tú? -re-pregunto-.

Joana: ¿Yo qué?

Cris: ¿Estás segura de que estás enamorada de ella?

Joana: No, tu sabes de quién estoy enamorada.

Cris: Ya, bueno.

Joana: ¿Qué pasa?

Cris: No estás enamorada de ella pero sigues con ella. Es tu novia.

Joana: ¿Estás celosa?

Cris: No, y creo que es mejor que te vayas -recojo las tazas, los platos y las llevo al fregadero. La escucho caminar, alejándose de mí y, a los segundos, escucho la puerta cerrarse. Dejo de fregar y cierro los ojos, suspirando cansada-.

Martes 18:45 (Joana)

Han pasado tres días desde que, Cris, me ha echado de su casa.

Cuando, ese día, llegué a mi casa estuve todo el día de mal humor pero, intenté que no se notara e, incluso, llamé a Martina yo esa noche cuando, normalmente, lo hace ella.

Ese día me di cuenta de que debía enfocarme en mi relación.

Sí, estaba enamorada de la misma chica hace dos años.

Sí, pueden hacerme feliz muchas personas pero nadie como ella.

Sí, quisiera en este momento estar con ella.

Pero no, no puedo seguir esperando que lo nuestro se dé. Ni siquiera debería pensar en "lo nuestro" porque no lo hay y, ella, ese día, me lo había dejado muy claro.

Mónica: ¿Ya sabes que te vas a poner hoy a la noche hija? -viene mi madre y me abraza mientras estoy sentada en el brazo del sofá-.

Joana: No, no pensé mucho en realidad.

Mónica: ¿Querés que te ayude?

Joana: -sé que ella ha notado que he estado un poco desanimada en estos días- Si, dale -asiento, me apoyo en su hombro y ella da un beso en mi frente-.

Mónica: Bueno, igual todo te queda bien. Saliste tan linda como tu madre -me hace reír y al mismo instante suena el timbre de mi casa- ¿Será el helado? -arrugo mis cejas porque estoy tan perdida que no sé de qué me habla- Maia quería.

Joana: Ahh -asiento, ella se acerca a abrir la puerta y yo me recuesto en el sofá, cubriendo mi cara con mi brazo, perdiendo visión de ella y el delivery-.

Mónica: No, no es el helado -escucho a mi madre decir y me siento para mirar hacia donde está-.

Cris: Hola -me dice, dejándome completamente sorprendida y, es por eso, que no le devuelvo el saludo-.

Mónica: Ahora la traigo -le dice a ella pero, yo no entiendo de qué hablan-.

Cris: -parece que ella nota que no entiendo- A Maia. Le traje algo.

Joana: Ahh -hago un movimiento de cabeza en su dirección y no vuelvo a hablar-.

Cris: Joana, yo...

Maia: ¡Quis! -la veo correr hacia ella y la más grande se agacha para poder abrazarla-.

Cris: Hola pequeña ¿Cómo estás?

Maia: Bien...

Cris: Me alegro. Mira -le enseña un paquete cuadrado, de al menos 10cm², color dorado con una cintura roja que forma un moño de regalo- espero que te guste y feliz navidad.

Maia: -Sonríe y vuelve a abrazarla- Gracias -alarga la "a" y le da un beso en la mejilla-.

Cris: Ábrelo -y a partir de ahí, ya no escucho ni veo la situación. Está claro que ha venido por Maia. O sea, no sé en qué momento pasó pero, a mi ex novia, le importa más mi hermana que yo. No sé cuántos minutos habrán estado riendo juntas pero, siento que no lo resisto entonces, decido esconderme en mi habitación. Me levantó del sofá y sin decir una palabra dirijo mis pasos hacia mi habitación pero, mi recorrido es evitado porque una voz me detiene- Joana...-doy medio vuelta y desde el lugar en donde me he quedado la observo, esperando a que continúe- Te he traído -y de su bolsillo saca un pequeño paquete rojo, no mide más de 5cm²- esto, a ti también.

Joana: -estira su mano, esperando a que me acerque y lo tome, y eso hago- Gracias -y lo voy a guardar en mi bolsillo pero ella me hace un pedido-.

Cris: ¿Puedes abrirlo ahora?

** Segundo trozo del día, son mas cortitos por eso hemos subido dos. Esperamos les guste! Saluditooos!!**