Capítulo 60

749 54 32
                                    

Mierda, mierda y mil veces mierda...

Te dije que vuestro nivel de tonteo era muy alto.

Lo siento, Conciencia. Pero estar con Tom es superior a mí.

¿Querrás decir tontear con Tom?

No...

Ah, ya sé. ¿Estar besando a Tom?

Ese no es el punto en estos momentos...

¿Ah, no? Pues es exactamente lo que está pasando en estos momentos.

¿Tú no vienes con un botón de mute?

Me temo que no. Pero tranquila, ya me voy. Aunque mi amiga La Culpa va hacerme el cambio...

¡¿Qué?! ¿En serio?

Ya lo creo...

- - - - - - - - - -

Miles de pensamientos se cruzan en mi cabeza mientras mis labios aún siguen demandando los suyos.

Mi mente está en otra parte, martirizándose. Mientras mi cuerpo sólo sigue impulsos y besa desesperadamente a Tom.

Sus brazos ahora se encuentran rodeando mi cintura y los míos alrededor de su cuello. Nuestras respiraciones se juntan y entremezclan, agitadas.

No quiero separarme. De hecho, ni siquiera creo poder ser capaz. Quiero seguir besándolo y cada vez que nos separamos para respirar, unos segundos son como años para mí.

Pero mi mente y mi cuerpo comienzan a unirse de nuevo. Y La Culpa está llamando a la puerta, mientras grita un nombre desde fuera.

Alessandro...

Y de un momento a otro, La Culpa acaba entrando dando una patada a la puerta.

Mis manos descienden desde el cuello de Tom hasta su pecho y empujo delicadamente, para separarnos.

— ¿P-pasa algo? —pregunta con una voz ronca que me hace suspirar. Me gustaría mirarle a los ojos, pero no soy capaz y prefiero mirar sus labios.

— E-esto —trago saliva. — N-no está bien...

— Lo sé —admite susurrando y apenado.

— Tom. Me gustas. De hecho... —suspiro, levanto la mirada para verle a los ojos. — Creo que me llevas gustando desde la semana que pasamos en España. Pero han cambiado muchas cosas. Hemos conocido a personas y yo... Yo...

— Está bien, Alys. Lo entiendo... —Tom me acaricia la mejilla y noto como mis ojos se humedecen. Niego con la cabeza y aprieto mis labios.

— Pues yo no —se me escapa una risa mezclada con un sollozo. Tom coloca su mano en mi pelo y mueve mi cabeza para quedarme apoyada en su pecho. Con mis brazos rodeo su cintura.

— Aly, tranquila. Sabes que me tienes aquí, siempre me tendrás. Pero está claro que Ales te importa...

— Pero yo no quiero que me importe —susurro con mi cabeza en su cuello. — Es decir, también es mi amigo y claro que me tiene que importar. Por eso no quiero... Dañarle.

Tom se separa de mí, aún con la mano en mi cabeza. Debe de estar viendo como estoy a punto de llorar, trago saliva.

— Tranquila, creo que tendrás tiempo para solucionarlo... —me dice sonriendo de lado.

Suelto un risa por lo bajo y me acerco a besarlo de nuevo. Noto como mis ojos dejan caer alguna lágrima rebelde, colándose en la comisura de mis labios.

Yellow Hearts 💛 // Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora