Capítulo 43

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Y como si un balde de agua fría me hubiera caído encima, abro los ojos.

La luz que había en la habitación era casi inexistente, pero poco a poco la luz del amanecer se podía entrever en las cortinas.

Iba a levantarme pero entonces recuerdo que sus brazos me rodean la cintura. Me giro con cuidado y le veo dormir plácidamente.

No me gustaría despertarle, pero debo volver a mi habitación. Con todo el cuidado y la sutileza que puedo tener, que no son mucha, cojo su brazo y lo levanto para quitármelo de encima. Hago un total "win" cuando soy capaz de sentarme y levantarme de la cama sin que tan si quiera se mueva.  

Le miro y veo como los rizos de su pelo negro le caen por la frente, llegando casi a sus ojos. No puedo contener una sonrisa. Y tampoco puedo evitar morderme el labio, cuando mi mirada pasa por su cuerpo sin camiseta.

Y antes de que se hagan aún más preguntas... No, Ales y yo no nos hemos acostado.

Ayer estuvimos dando un mini paseo por la pequeña zona de playa justo debajo de la casa de la fiesta. Tuvimos la oportunidad de pasar tiempo a solas, ya que hace meses que no tenemos ese privilegio. Poco más tarde, volvimos a la casa en busca de nuestros amigos para poder irnos.

Es cierto que Ales estaba un poco pedo, pero sin duda no superaba el nivel de Ro y Cameron. Isabella se encontraba en punto medio. En resumidas cuentas, tuve que hacer un poco de mamá responsable... Irónico, porque de normal yo era la que peor acababa.

Mientras salíamos de la casa, mi vista buscaba a alguien, inconscientemente. Aunque sé perfectamente a quién buscaba...

Cogimos un Uber para ir a nuestro hotel y llegamos alrededor de las cuatro de la mañana, tampoco muy tarde. Primero, pasamos por la habitación de Cameron y se fue directo a su baño. Isabella se iba a venir a dormir a nuestra habitación. Después, fuimos a la habitación de Ales e Isabella, para dejarle a él. Entonces fue cuando me pidió que me quedara con él en la habitación. 

Tras pensarlo unos segundos accedí, pero primero debía acompañar a Ro y a Isabella a nuestra habitación. Ellas se cayeron directamente en la cama y, segundos después, oí roncar a alguna mientras me ponía el pijama. Una vez lista fui a la habitación de Alessandro.

Parecía que se le había pasado un poco el pedo porque fue capaz de decir frases enteras con sentido. Nos pasamos bastante tiempo hablando, entre mimos y besos. Pero sólo eso, nada de sexo.

De hecho, soy virgen y me gustaría estar perfectamente segura de lo que hago cuando llegue el momento. Y eso Ales lo sabía y lo respetaba, totalmente. Por eso no le di mucha vuelta de cabeza cuando me propuso ir a su habitación.

Cojo mi tarjeta de la habitación antes de salir y miro la hora. Las siete y pico...

Cuando llego a mi habitación veo como las chicas están igual que las deje. Así que sin pensarlo mucho más me tiro en plancha a mi cama.

*****

—¡Despierta! —Rooney pega un brinco y un grito ante el susto de mi voz y la almohada chocando con su cabeza.

—¡Alyssa! —Isabella y yo no podemos evitar reír.—En serio deberías hacerte unos análisis para ver tus niveles de azúcar en sangre... mejor dicho de cafeína —dice rascándose los ojos.

—Pero si son las dos de la tarde —digo riendo mientras me siento al lado suya en su cama. Bella se sienta a los pies de esta, mientras se coloca sus características gafas.

—Ten en cuenta que ayer llegamos a las cuatro de la mañana.

—Exacto. Además, me duele la cabeza... —dice Ro cerrando los ojos mientras se rasca la cabeza.

Yellow Hearts 💛 // Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora