Piper y Hazel están cerca de cargarse la madera del suelo

365 36 272
                                    


POV Percy

No podía prestarla atención, todo se me venía encima. El pequeño discurso de Travis que finalizó con la promesa de que la traería de vuelta junto a su hermano me había dejado mal cuerpo, sobretodo porque me encontré a mí mismo deseando que fuese cierto y Miranda volviese. Apagué totalmente el cerebro, no escuchando a Reyna hablar en su pequeño discurso de despedida, tratando yo mismo de despejarme la mente y abandonar esas ideas que solo parecían lógicas por el dolor que acarrean. Me sentí tentado en decir: sí, vamos a recuperarla. Pero no es lo que querría Miranda ni lo correcta, ella misma lo sabía y no podía fallarla.

Mis ojos estaban fijos en el pulgar de Thalia frente a mí, dando vueltas de forma distraída por la mano de Reyna mientras esta luchaba contra su propia voz para que no se cortase al dar su despedida a su amiga. Agradecía que estuviese ahí con ella, yo no me sentía capaz para consolar a nadie, no cuando solo pronunciar el nombre de Miranda me producía un sentimiento de ahogo y profunda tristeza.

La mano semi vendada de Will Solace estaba sobre la de Nico, paseando su pulgar en dibujos aleatorios esperando con paciencia a que se despertase. Desde que supe que estaba solo con él quise venir a darle apoyo y al recibirme con un fuerte abrazo, supe que lo necesitaba como nadie, no dudando en quedarme para cuando despertase como me pidió. No hacía falta que hablase, solo necesitaba que estuviese aquí.

Habían venido algunos a verle, sobretodo Hazel que se quedaba una hora a lo mucho, pero al igual que el resto, con miedo a que Nico se despertase cuando estaban ahí, no querían ver su reacción. Reyna sí se había ofrecido a estar, pero tardé en convencerla que mejor estuviese ausente, ya tenía demasiado con su amiga fallecida, como para añadirle más preocupaciones en la cabeza.

No sabía cómo Will iba a poder tranquilizarle ¿Qué le diría? Lo único que se me pasaba por la cabeza era que viese que se le había quedado un muñón en apenas segundos gracias a un dios, cosa mucho más esperanzadora que tener uno que tardase un largo tiempo en formarse. Igualmente algo me decía que le iba a importar poco el gran trabajo que había hecho Apolo, por más impresionante que fuese.

-Tranquilo - le susurré a Will cuando se tensó al ver que Nico comenzaba a despertar.

-¿Cómo te encuentras? - preguntó con dificultad Will al ver el perezoso parpadeo de Nico.

-Bien.

Sentía que me observaban, recordé las palabras de Apolo y no me extrañaría que estuviese aquí, lo que ahora no lo veía. Nico seguía medio desorientado, respondiendo como podía a algunas preguntas rutinarias que Will siempre nos solía hacer cuando nos levantábamos luego de un desmayo. No estaba irascible, solo tranquilo y mareado, esperaba que eso ayudase.

La broma de Will para rebajar el ambiente sobre lo pálido que estaba se vio cortada cuando Nico trató de incorporarse, cayéndose de lado y siendo sostenido rápidamente por mí. Sus ojos estaban fijos en mí, sentía como si estuviese leyendo mi cerebro para averiguar qué había pasado y cerré con fuerza los ojos cuando le vi desviar la mirada hacia donde estaría su brazo izquierdo.

-¿Q..qué.. - trató de preguntar mientras le soltaba de nuevo en la cama.

-Delfina te mordió - comenzó Will con la voz temblorosa como si estuviese aguantándose las ganas de llorar - Veneno. Una infección... no pudimos... Apolo te salvó.

-¡No! - gritó tratando de incorporarse pero volvió a caer sobre el colchón, su expresión cambiando a absoluto terror al ser consciente - ¡Es mentira! Yo... lo siento ¡está ahí! Me duele - comenzó a negar.

-Es el síndrome del miembro perdido - respondió Will sin poder ser capaz de mirarle - Tu cerebro aún no lo acepta.

-¡Mientes! - le gritó pero sus ojos comenzaron a aguarse cuando llevó sus propios dedos a donde tendría que estar su antebrazo - ¿Qué me habéis hecho? ¿¡Por qué!? No es posible.

Lost at sea: CollapseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora