Cambiamos el mapa por una paloma blanca

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POV Percy

Mis días siempre solían ser raros o quizás un día normal para el resto de la gente es lo que yo consideraría raro, pero esta vez, estaba teniendo un día raro para los ojos de gente normal con problemas normales. En resumen, raro.

-Apareció encima de tu mesa - repitió Thalia mirando el papel.

-Nuestra mesa - corregí y chasqueó la lengua restándole importancia - Y sí, estaba... solo apareció - cambié al notar que iba a decir que de nuevo estaba ojeando los planos de Annabeth.

No entendía nada por más que los miraba pero no esperaba sacar información, solo... contemplaba. Me gustaba verlos, porque los había hecho Annabeth y siempre estuviésemos enfadados o no, yo la miraba dibujándolos. Ahora solo me quedaba ver los trazos para sumirme en los recuerdos de tenerla sentada en la silla y totalmente enfrascada en su tarea. Tan ridículo que ahora vivía soñando cómo era todo antes.

-Y no entró nadie - repitió de nuevo lo que ya le había contado y bufé - Joder qué quieres Percy, ha aparecido un puto papel de la nada.

-Aquí aparece sangre por el suelo y las paredes, creo que esto es muchísimo mejor. Yo lo prefiero - repliqué.

-Bueno para gustos los putos colores. Al menos yo sí sé de dónde viene la sangre - respondió antes de decir el nombre de Clarisse en un susurro como si no me lo imaginase - ¿Y qué hacemos?

-¿Tu quieres ir? - pregunté y negó - Yo tampoco.

-Genial, pues a la mierda. - dijo arrugando el papel y lanzándolo hacia la puerta - Otro problema solucionado por la gran gestión Grace-Jackson.

-¿Por qué tu nombre va primero? - pregunté divertido mientras apartaba los planos de Annabeth de la mesa antes de que las botas de Thalia los arrugasen.

-La pregunta es ¿y por qué no? - levantó el dedo índice con cara de interesante y ladeé la cabeza - Así queda mejor, no molestes excremento de calamar.

-Tienes el gusto en el culo - insulté - Mi apellido es mejor.

-No me desobedezcas, soy la capitana.

-Yo también lo soy.

-Me nombro capitana de los capitanes - arregló.

Me quedé mirándola un buen rato y ella a mí. Siempre perdía yo pero esta vez sería diferente, no pensaba parpadear antes que ella, había practicado y por fin me alzaría con el triunfo.

-¿Pero qué hacéis? - escuché a Jason pero no aparté mi vista de Thalia - ¿Y por qué no parpadeáis?

-¿Una competición de miradas sin mi? Sois un asco de amigos - dijo Piper - Apuesto por Thalia.

Sentía mis ojos resecos, en cambio Thalia parecía tan tranquila como siempre, es más una sonrisa soberbia comenzaba a asomar en su cara al ver que yo ya estaba empezando a pasarlo mal. Quizás es porque sus ojos son más oscuros que los míos y no le afecta tanto el sol (aunque estábamos dentro del camarote) pero su azul eléctrico tenía más pinta de resistente que el mío. Aguanta Percy.

<<¡Thalia Grace!>> escuché el regaño de Reyna y fue lo que necesitaba para alzarme con la victoria cuando mi compañera pegó un salto en la silla del susto. Parpadeando.

-¡Gané!

-¡Eso es trampa! - se quejó Thalia y miro hacia la puerta mientras se rascaba los ojos como yo - ¡Mira lo que has hecho! - le gritó a Reyna.

-Tienes cinco segundos para explicarme por qué había una nota arrugada en el suelo que pone expresamente que una diosa quiere vernos - exigió golpeando el papel que tiró antes, ahora abierto de nuevo, contra nuestra mesa.

Lost at sea: CollapseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora