Un dorama de bomberos | Multishiping

LXIX

— Auron -Mira el techo con una sonrisa en la cara, tratando de dejar de reírse. Aprieta un poco más la sabana contra su cuerpo- ¿qué fue eso?

— ... ¿has escuchado? -trata de hablar y respirar al mismo tiempo- cuando los padres buscan como deshacerse de los niños para encontrar intimidad... creo que fue eso. Lanzamos a los niños a una pijamada en la casa de alguien más y aprovechamos.

— Sí, solo que la pijamada fue una loca misión de búsqueda de información. Aunque por lo otro tienes totalmente la razón. El solo pensar que no van a llegar o saltar de repente, hablar por teléfono o molestar. Increíble ¿por qué no hicimos esto antes?

El teléfono del trabajo de Luzu empezó a sonar

— Bueno, se acabó nuestro momento de padres sin hijos -Se queja el castaño, tratando de alcanzar su móvil.

— Nada es para siempre, mucho menos lo bonito y agradable -Se sienta contra la cabecera de la cama para acomodarse.

— Oh es Ramón -Le informa a Auron antes de responder la llamada- Hola, Ramón ¿qué ha pasado? Sí, estoy en casa ya.

Hay un momento de silencio, porque el bombero escucha atentamente a su co-capitán. Auron sabe que si es Ramón no es una llamada para conversar casual. Algo surgió.

— ¿En serio? No, no, todos están fuera en este momento. Iré yo, no te preocupes estaré ahí muy rápido -Se va levantando de la cama mientras continúa en la llamada- No, no hace falta. En serio, yo puedo hacerlo.

Auron comenzó a seguirlo con la mirada por toda la habitación, mientras el pobre iba saltando de aquí para allá buscando que ponerse.

— Te veo en un rato entonces -cuelga la llamada- casi todo el equipo y el de la 005 están juntos apagando un gran incendio por la 5° necesita que alguien se quede en la estación por si ocurre un llamado tener gente de repuesto.

— ¡Voy contigo!

— No creo, será mejor que te quedes. Tomas un baño y te vuelves a acostar.

— ... ¿qué se supone que quieres decir?

— Emmmhh -se ríe un poco- Que te quedas, por si algo sale mal con los chicos. Nadie se supone que sepa lo que ocurre con ellos, es mejor tener a alguien de respaldo -le lanza su celular normal- por si te habla Willy o alguien. Nos veremos para el siguiente turno.

— Entonces tú también quédate, vamos que no pasa nada, tío.

— Si pasa, recuerda que ahora somos menos estaciones y ya estamos viviendo las consecuencias de eliminar estaciones. Jamás antes pasó esto de necesitar apoyo de otras estaciones.

— Siento que tú solo quiere convencerte de que no es una locura lo que estamos haciendo. Que tienes razón y debemos ser los héroes.

— Auroncito, somos los héroes. Somos bomberos.

— Rescatamos personas de incendios, accidentes automovilísticos, gente atrapada, animales y otras cosas. No somos espías o agentes especiales.

— Tú acabas de decir que somos multitareas ¿por qué no podemos ser espías?

— Porque no tenemos entrenamiento para torturar sospechosos. Somos personas comunes. Luzu, luzu, ven acá.

— Tengo que irme a la estación a ser una persona común.

— ¡No cambies mis palabras!

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— ¿Aquí es? Es diferente de la última vez.