- ¿Qué dices? Claro que eres mi madre.
- ¡No! - la ira que me consumía dejaba daños en mi garganta - ¡No llevas nada mío, por tus venas corre la sangre de Rasa Bas Kadinn y tus manos están manchadas con la sangre de mi hijo! - la expresión de Neylan simplemente se transformó a una de tristeza y miedo.
- ¿Qué? - su voz era apenas audible.
- ¡Lo sé todo, asesina! ¡Tu mataste a mi hijo! ¡Debí dejarte sola! - a este punto ella solo lloraba por mis duras palabras.
- No, no, no me digas eso - Hamza pidió a las criadas que se encontraban en el lugar que salieran.
- Escúchame bien: no quiero que te vuelvas a acercar a uno de mis hijos - amenacé señalándola.
- Pero...
- Llega a pasar algo a uno de ellos y tú serás la culpable - me puse cara a cara con ella sin importar la diferencia de estatura - te juro por la memoria de Arpaslan que destrozaré tu vida - salí de los aposentos dejándola hecha un mar de lágrimas.Lo último que quería era ver a esa maldita que había destruido mi vida; dedique años de mi para que no sintiera el vacío por Rasa y ahora ella me había destrozado en mil partes.
*****
Zambak y Yussuf creyeron que sería un buen momento para visitar a su madre; que equivocados estaban.
Al pararse en la puerta y ver a Neylan sentada llorando y a las criadas recogiendo restos de vidrios bajo una mirada asustada ambos sintieron preocupación.
- Yussuf ve a tus aposentos - en contra de su voluntad obedeció a su hermana mayor. Zambak esperaba que Neylan le dijera algo pero eso no ocurrió, ni siquiera levanto su mirada del piso - ¿Qué pasó? - interrogó a una odalisca que salía con telas llenas de tinta que limpió de los muebles.
- No puedo decirle - intentó seguir su camino.
- Si no me dices, no esperes ver el siguiente amanecer - evidentemente la chica se asustó con semejante amenaza.
- Creo...- miró a los lados para asegurarse que nadie escuchaba - que la sultana Halime se ha enterado que la sultana Neylan dio la orden para que el sehzade Arpaslan fuera asesinado - Zambak rió con incredulidad.
- ¿Dices que mi propia hermana mandó a matar a Arpaslan, su propio hermano? - la hatun asintió frenéticamente - Es una broma de mal gusto, mi hermano murió por una enfermedad que no le fue diagnosticada a tiempo - su informante por miedo a morir aclaró aún más.
- La sultana Halime recibió una carta anónima y después se puso como loca - Zambak la miró mal - Disculpe - continuó apenada - lanzo las cosas y maldijo a la sultana, luego la misma entró y su madre juró por la vida del sehzade que le haría la vida imposible.
- ¡Calla! - Neylan había escuchado todo desde su lugar. Zambak comenzó tambalearse y la hatun la ayudó a sentarse.
- ¿De verdad lo mataste? ¿Neylan mataste a alguien de tu misma sangre?
- De verdad, no es lo que parece.
- Ah claro, mi hermano murió de enfermedad - respondió sarcástica - ¿Crees que soy tan tonta como para seguirme tragando el cuento de que estaba enfermo? Que malagradecida eres - sus ojos reflejaban el dolor que sentía; realmente no era solo dolor, era furia, enojo, decepción e incluso vergüenza - da gracias a Allah que no lo sepa Aslihan.
ESTÁS LEYENDO
Amable:Una sultana escondida |COMPLETA/CORRECCIÓN|
Historische RomaneDolor, traición, venganza, rencor, deshonra y muy poco amor son el pan de cada día en el palacio de Topkapi ¿Qué darías tu por amor? ¿Eres capaz de renunciar a lo valioso? ¿O simplemente te resignas a perder lo que amas? ¿Realmente el amor soporta t...